Tres veces lloró Pancho Villa

Eso escribió Marco Antonio Gómez Pérez en su libro de grandes mexicanos.

La muerte de Francisco Villa que dice fue su padre adoptivo y de quién tomó su nombre.

El asesinato de Francisco I. Madero y el fusilamiento de Felipe Ángeles.

Doroteo Arango Arámbula el verdadero nombre del más grande guerrillero que conoció la revolución mexicana.

Nos encanta escuchar de sus anécdotas.

Peón de campo y de albañilería.

Ladrón de ganado de los grandes hacendados.

Habitante de los más lóbregos lugares de la sierra de Durango y Chihuahua.

Vengador del honor de su hermana menor que se cuenta fue violada por el hijo del hacendado en que vivió.

Perseguido con la orden de capturarlo vivo o muerto.

Perseguido por las tropas americanas cuando invadió Columbus.

Es el único invasor de la historia de los gringos y vivió para contarlo.

Jinete y tirador de excelencia.

Despiadado en sus órdenes de fusilamientos.

Villa y Zapata los más recordados.

El general Obregón ordenó su muerte.

Jamás le creyeron su retiro en la hacienda de canutillo.

Villa se confió y más de cien impactos de bala quedaron alojados en su cuerpo y el de sus acompañantes.

Lo emboscaron y cayó redondito en Parral.

Robaba a los hacendados y repartía el botín entre la gente pobre de los pueblos.

El Robin Hood mexicano.

Andrés Manuel López Obrador no se identifica con Pancho Villa.

Pancho repartía balazos y no abrazos.

Los modos de Villa mantenían la sierra ordenadita.

Doroteo Arango representaba la ley del monte.

Muy temido por los terratenientes y bendecido por la gente pobre.

En los desfiles escolares todos queríamos ser vestidos como Pancho Villa.

Doroteo Arango se casó tres veces.

Andrés Manuel lleva dos.

Pancho Villa mató a mucha gente en la revolución y encabezaba personalmente las batallas.

Andrés Manuel también mató y sigue matando mucha gente y comisiona al Dr. López Gatell para ejecutar las órdenes.

El presidente supera a Villa con casi un millón de fallecidos.

Sin soltar un solo disparo resucita General Villa y saca de la lengua a los que nos tienen agarrados del pescuezo.

Nosotros usamos la credencial de elector y usted mi General Villa su carabina treinta 30-30.

Una pregunta General Villa:

¿Cómo se dispara una carabina?

Con muchos “guevos” y ahí se cortó la plática.

Hasta mañana.

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J. Humberto Cossío R.

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