Todo un reto enfrentar a AMLO…

Algo contundente en mi análisis de hoy. Algunos de estos desenlaces llevan al enfrentamiento abierto, como ocurre con la Corte, donde la resolución de la controversia constitucional de la Guardia Nacional subordinada al Ejército, fue declarada inconstitucional por lo que debe recuperar su naturaleza civil.

Ante la sentencia de la Corte, el Presidente Andrés Manuel expresó su irritación: “Los ministros de la Corte están al servicio de las cúpulas de poder”. Una frase que descubre el conflicto de poderes a causa de una crisis constitucional.

Las contingencias del ejercicio presidencial no afectan su popularidad, en todo caso cambia de dirección; el Movimiento de la 4aT en su percepción de sufrir un ataque a sus objetivos ha puesto en marcha un operativo de movilización en contra de la Corte.

La movilización “Escudo AMLO- el pueblo manda”, anuncia un cerco al recinto del Supremo Poder Judicial, durante la semana que corre desde el pasado 24 al viernes 28 de abril, a manera de un plantón de aislamiento a los usuarios.

Algunos de los seguidores consideran que al Presidente lo están obligando a radicalizar su marcha para cerrar su sexenio con una gran movilización de masas donde se definan los cambios de la Cuarta Transformación, entre ellos cambiar la designación de ministros al sustituir dicha designación por su elección. Se trata de una reforma constitucional donde Morena no reúne los votos de una elección calificada. ¿Un círculo roto?

 

 

Las denuncias de AMLO al injerencismo de Washington, lo sitúan en medio de la tempestad electoral de 2024, los llamados a mexicoamericanos de votar contra del Partido Republicano abre el camino a una respuesta dura de calificar al Gobierno de Morena como auspiciador del narco-Estado. ¿Vale entonces la pena escalar calificativos excluyentes? Eso será otra historia.

Este fin de sexenio no es una competencia de despedidas. El grado de tensión se eleva y los contendientes salen a pelear. Aunque no todos los combates se visibilizan. Tal es el caso del Congreso donde persiste una entente que sumerge el grado de colisión que lo llevan a sufrir un atascamiento.

En el Senado el grado de enfrentamiento es abierto. La oposición se muestra proactiva, llevan a la reconstrucción de Agenda como ocurrió con las reformas al INE convertidas después en Plan B, o bien como la decisión de no acudir a la ceremonia de la Medalla Belisario Domínguez para cuidar la investidura, más que cambios en estrategia son afirmaciones residuales obligadas.

La ceremonia del Senado es la oportunidad de encuentro de poderes de la República, la que prefirió darle la vuelta. Y en San Lázaro se pasa por un problema grave de orden estructural, aun no visibilizado a fondo.  Se trata de una crisis de la representación política, que es la piedra de toque en que descansa la democracia representativa.

En la tradición republicana se define la representación a partir de la población en situación geográfica, por tanto, se trata de ciudadanas y ciudadanos, hombres y mujeres con derechos y obligaciones. A partir de la globalización que no reconocía sectores o clases, se construyó una identidad horizontal que afectó a la identidad nacional, porque de lo general se pasó a lo particular para construir una igualdad a través de la diferencia o de la exclusión, las minorías prevalecieron por sus diferencias.

En San Lázaro no salió adelante una iniciativa de ley a favor de la partidocracia; en consecuencia afectaba las facultades del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), a su vez descobijaba a las minorías. El castillo de arena de la JUCOPO comenzó a derruirse con la oposición de 60 diputados de Morena, y 30 de otros partidos se opusieron por considerar que estarían desprotegidos ante la voracidad de los partidos que dejarían sin efectos el principio de las cinco acciones afirmativas que hasta el momento están reconocidas. En la actualidad se ha alcanzado la paridad e igualdad sustantiva como lo determinan los principios constitucionales.

La protesta de 90 diputados fue encabezada por la presidenta de la Comisión de Pueblos Indígenas y Afromexicanos, Irma Juan Carlos (Morena), por temor de que la iniciativa destinada a limitar al TEPJF dejara sin efectos de contrapeso para el control de violaciones de derechos políticos electorales de los grupos minoritarios y vulnerables.

GOTITAS DE AGUA:

 

Ante todo este escenario, hay escepticismo de caer en la parálisis. Esta iniciativa ha sido frenada, fue atrapada en el rezago legislativo invisible de la ineficiencia parlamentaria. Por eso, lo que se debe ofrecer es una mejor capacidad de conocimientos en los integrantes de las legislaturas, recayendo esta responsabilidad en los partidos políticos cuya línea de horizonte cultural parlamentario deja mucho que desear al llegar al extremo de rifar en tómbolas las candidaturas de las representaciones, al provocar un daño a la composición de la representación general.

No hay sexenio con final feliz. Frente a una crisis de constitucionalidad, conflicto entre poderes, y el amago de republicanos de pasar como Narco Estado. Todo un reto a resolver para la habilidad de AMLO“Si cierran la puerta, apaguen la luz”. “Nos vemos Mañana”…

Todas mis columnas en: https://altoparlante.com.mx/sobre-el-camino/.

 

Benjamín Bojórquez Olea

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