Hay que decir las cosas como son, y advertir que Sinaloa ya no aguanta a la presidenta asesina.
Son cada vez más insultantes sus complicidades con los cárteles y con el narco gobernador.
Otra terrible tragedia la de ayer, con dos niñas inocentes fallecidas.
Más días, semanas y meses de terror, mientras el gobierno presume logros inexistentes para seguir con las omisiones y los atoles.
Repreguntamos cuántas víctimas más necesita Claudia Sheinbaum para poner orden en Sinaloa.
Eso de que no puede quitar ni poner gobernadores es lavarse las manos de manera muy irresponsable.
Hay diversos procedimientos legales para desaforar a Rubén Rocha Moya u obligarlo a presentar su renuncia.
El gobierno ya demostró la complicidad de Rocha en el asesinato de Héctor Melesio Cuén Ojeda.
A pesar de las pruebas contundentes que hicieron públicas, la presidenta y el partido morena solapan al criminal que desgobierna nuestro estado.
Sus nexos con el Cártel de Sinaloa fueron evidenciados ni más ni menos que por el propio Ismael “El Mayo” Zambada.
La pregunta de por qué doña Claudia no hace nada se contesta con lo que acaba de decir Donald Trump: “le tiene tanto miedo a los cárteles que ni siquiera puede pensar con claridad”.
Durísima crítica, apegada por completo a la verdad.
Por eso sigue vigente el hashtag de #NarcoPresirvientaClaudia.
La señora es chacha de los narcos y del titiritero.
El pueblo bueno sufre y muere, porque el gobierno protege a los criminales.
Por eso el terror que vivimos en nuestra entidad.
Cuánta verdad la de que Andrés Manuel López Obrador es el mejor presidente que ha tenido el narco.
Con Claudia Sheinbaum Pardo continuando con los abrazos al crimen y los balazos al pueblo.
El expresidente mató indirectamente a cientos de miles y la presidenta va que vuela para superarlo.
Reiteremos que Sinaloa ya no aguanta a la presidenta asesina.
Las víctimas inocentes están en la cuenta de muertes por irresponsabilidades desde palacio nacional.
De muy poco o casi nada han servido los “refuerzos” de cientos o miles de elementos del Ejército, la Marina y la Guardia Nacional.
Los criminales siguen haciendo lo que se les pega la gana.
Está demostrado que los abrazos continúan como orden oficial, aunque ahora por debajo del agua.
Las víctimas son ignoradas cuando acuden a solicitar la protección oficial.
Por eso tantos montajes.
Hay que fingir detenciones, decomisos de droga, destrucción de narco laboratorios y demás “logros”.
La narrativa de los otros datos, con mentiras muy descaradas.
Morena es un narco partido que protege a sus narco políticos y a sus socios del crimen organizado.
La cuarta transformación es pura mierda.
Sin recato, presumen sus falsos principios de no mentir, no robar y no traicionar.
A esa bola de hipócritas y principalmente a su presidenta, hay que preguntarle una vez más hasta cuándo nos seguirán asesinando.
Todas mis columnas en: https://altoparlante.com.mx/altoparlante/.