No se cansa el expresidente municipal de Culiacán en sus intentos de descalificar la jugada de los cuarenta.
Lo dice muy claramente. Su sustituto es un presidente espurio que no fue electo por la voluntad mayoritaria de un pueblo.
Presidente de los cuarenta.
Así se expresa Estrada Ferreiro del actual Alcalde Juan de Dios Gámez y pareciera que con sus palabras lo señala que es un empleado de Alí Baba y sus cuarenta ladrones.
Dice que los Diputados ven al Ayuntamiento como un botín y que mandan como encargado a Juan de Dios a custodiarlo.
Creí que Estrada Ferreiro le había manifestado en fecha reciente su apoyo a Juan de Dios y por lo que vemos, poco le duró el gusto y ya recibe los bombazos del destituido.
De todo podrán acusar a Estrada Ferreiro, menos de que permanecerá en silencio y que acepte el negro destino que le fabrican en tribunales, desde la Fiscalía General de Sinaloa a cargo de la señora Bruno.
¿Hasta dónde llegará?
Con estrada Ferreiro no se sabe a ciencia cierta y menos cuando se encuentra en riesgo de perder su libertad.
Tendrá que esmerarse para librar las acusaciones que llegarán por toneladas ante los Jueces de nuestro Estado.
Agarró pleito con el que tiene el satén por el mango.
Ha sido convertido en chivo en cristalería y quieren que pague los daños causados y con sobre precio.
No conocemos a Juan de Dios Gámez y jamás nos dio la oportunidad Estrada Ferreiro de conocer sus puntos de vista.
Dejé la petición verbal para una entrevista y nunca me contestaron.
Tampoco insistí demasiado y ahora no le encuentro caso el tratar directamente con Estrada Ferreiro.
Ningunear al Congreso, como lo hace el expresidente destituido, puede ser una aberración política y quizá nunca encuentre el camino para reivindicarse.
Quizá quiera arrojarles lodo a los diputados y con ello encontrar eco en los tribunales federales donde ejerce sus derechos de garantías.
Muy peligroso camino y parece que es el escogido por Estrada Ferreiro.
El Gobernador de Sinaloa no se inmuta.
Tomó su decisión y Estrada Ferreiro está fuera del camino.
No se mandó a Feliciano Castro al relevo y tampoco a la titular de la Secretaría de Educación.
Se hubiera visto muy mugroso el relevo.
Cuando me dicen que Juan de Dios es ahijado político de Rubén Rocha Moya, recuerdo que ningún Gobernador puede tener a los enemigos en casa.
Se gobierna con gente de confianza y es el caso del sustituto de Estrada Ferreiro.
De entrada, se echaron a la bolsa a las viudas de policías.
Se sentirá apoyado por jubilados y pensionados con los descuentos por motivo de la edad, sin importar las condiciones económicas del beneficiado.
Es situación acorde con el gobierno federal.
Regalar dinero sin mirar a quién.
Sigue tirando patadas Estrada Ferreiro.
Veremos donde acaba el asunto.
Hasta mañana.
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