No es fácil vencer el rechazo y la cultura política jurásica, que por años, ha imperado en Sinaloa.
Una resistencia es un tipo de barrera u obstáculo consciente o inconsciente que no nos impide avanzar. Estas resistencias políticas abarcan desde creencias, hasta emociones y sentimientos. Muchas personas tienen resistencia al cambio debido al miedo, la ansiedad o el dolor que este cambio pueda suponer, dejar el poder o resistirse a él. A eso se ha enfrentado el gobernador sinaloense, Rubén Rocha Moya.
Hombres y mujeres, con el único recurso de la tenacidad y el valor, han luchado y vencido a las sangrientas tiranías. El ser humano sabe hacer de los obstáculos nuevos caminos porque a la vida le basta el espacio de una grieta para renacer.
Cuando no sabemos qué nos vamos a encontrar. Uno de los grandes temores del ser humano: la incertidumbre ante un cambio.
Cuando tenemos incertidumbre al cambio nos sentimos inseguros, no tenemos asideros y tenemos que ir casi a ciegas. Pero tenemos que hacerlo, tenemos que vencer esa incertidumbre al cambio que va a estar ahí.
Rubén Rocha Moya ha tenido que sortear un inevitable cambio de ideología, sin ataduras y el convencimiento de una parte de la población, o más bien, de esa clase política que intenta a toda costa resistirse al cambio debido a que deja de formar parte de él.
La conducta del gobernador Rubén Rocha Moya es otro de los grandes miedos que tienen en la oposición, enfrentarse a las tiranías, ¿y si le sale mal?, ¿y si fracasa?, ¿y el dolor que me va a generar políticamente al cambio y al posible fracaso?, ¿y qué dirán los demás si lo hago mal o bien y se ríen de mí? Es uno de los miedos más paralizantes que existen. Pero es un miedo que está solo en el cambio.
Nos vemos enfrentados ante las tormentas de maldad, desprecio, indiferencia; azuzadas por seres que buscan generar la división entre hermanos y cuyas mentes obscuras y perversas, solo esconden en la miopía de su ego estúpido y en la pobreza de su alma, la pueril y vulgar comprensión de su breve existencia terrenal. ¿A poco la derecha u oposición en este caso tiene la verdad absoluta en Sinaloa? Considero que no.
Todas esas personas de la derecha que tienen una gran tendencia a intentar agradar, complacer y estar demasiado pendientes de lo qué dirán los demás tienen un gran miedo a decepcionar. A que nos dejen de querer si están alejados de la función pública, que los rechacen si decir lo que piensan, eso no quiere decir que les asiste la razón en todo, ya que todos caminan en base a sus intereses personales, o que lleguen a sentirse superados. Es un miedo del que deben ser conscientes para poder superarlo.
¿Y qué provoca Rubén Rocha Moya? Muy sencillo. La soledad política es el purgatorio opositor, como del que vive bajo la amenaza de la “Hibris” que lo persiguió por años y cumplió su castigo al expulsarlos del poder en 2018, y posteriormente, en el 2021. Desde entonces, sus estrategias fallidas y falta de renovación no han hecho otra cosa que agudizar el padecimiento de “Cronos”, nombre dado a esa patología por el Dios griego que devoraba a sus hijos por el temor a ser derrocado por ellos.
¿Cuál ha sido la cultura de la oposición respecto a Sinaloa? A mi criterio, no suelen mirar con el dedo y acusar si hacen algo diferente a los demás. Pero al mismo tiempo han actuado de forma hipócrita que no alienta a ser diferentes y decir lo que piensan. Esta contradicción provoca confusión, miedo e incertidumbre al cambio. Entonces, se tienen que ir los que se tengan que ir.
GOTITAS DE AGUA:
Las historias que han definido el presente del Partido de la Revolución Institucional, del Partido de la Revolución Democrática, del Partido Acción Nacional, son muy diferentes, aunque tienen una base en común: el lastre de su propia fama. Resulta muy complicado que, de la noche a la mañana, desaparezcan los hitos que marcaron el ejercicio del poder y los nombres de quienes han quedado en la memoria de una sociedad que no les volvería a abrir, con facilidad y confianza, las puertas de sus casas.
¿A qué se refiere Rubén Rocha Moya? Entiendo que, se refieren a los cambios que vienen desde adentro y fuera, a los cambios del entorno. Por ejemplo, el cambio de una asignatura o de una carrera universitaria, cambio de pareja, un nuevo hogar, es lo mismo lo que pasa en política. “Si cierran la puerta, apaguen la luz”. “Nos vemos Mañana”…
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