Fax del Fax

Prácticas de la técnica escolar de supervivencia

Hombres protegidos por los derechos humanos y el presidente Andrés Manuel, se convirtieron en instructores de planteles escolares y Kínderes que se encuentra en el sector de la campiña de Culiacán.
También participaron en esas prácticas miembros de la Guardia nacional en compañía de elementos de las policías estatales de Sinaloa.
Los hombres más queridos del presidente de México viajaban a bordo de modernas camionetas y muy lujosas, por cierto, cuando se topetearon con los elementos oficiales en lugar cercano a un centro comercial.
Los bendecidos por nuestro primer mandatario de la Nación, sacaron a relucir su poderoso armamento y en segundos convirtieron ese sector en campo de guerra y dispararon a diestra y siniestra en contra de lo que se moviera o tuviera orejas.
El terror se apoderó de maestros y alumnos los cuales fueron tirados de pancita y con los brazos alrededor de la cabeza para protegerse. Así estuvieron hasta que cesó la incruenta balacera.
Los soldados de la guardia nacional hicieron lo mismo. Se tiraron de panza en el pavimento detrás de sus unidades y rogando a Dios para que no les tocaran impactos de bala de sus agresores.
La técnica de supervivencia dio resultados maravillosos.
No hubo lesionados en las escuelas y tampoco en la corporación de la guardia nacional y sus auxiliares de las policías estatales.
No hubo abrazos, pero si hubo balazos.
Los padres de los niños llegaron en tropel a buscar a sus críos y dieron gracias a Dios y a los maestros por encontrar a sus plebes a salvo.
Funcionó la estrategia de tirarse al piso y esperar a que se acabara la tracatera.
No hubo heridos o muertos entre agresores y agredidos.
Esconderse dio resultados. Los hombres que gozan del cariño y protección de la presidencia de México se fueron del lugar festejando su hazaña.
Bendito sea el señor por proteger a tirios y troyanos.
Rogamos a nuestro señor, Jesús Cristo, para que siga protegiendo a los miembros de la delincuencia organizada y cuidando también la vida de niños, maestros y policías que salvaron su pellejo, gracias a la maravillosa idea de tirarse al piso de pancita y no abrir los ojos hasta que el silencio los envolviera.
A propósito de Andrés Manuel, nos llegará a Sinaloa dizque para supervisar obras carreteras y avance en la presa picachos. Estará tres días en esa “importantísima tarea” que pudiera darnos otra casualidad y que la señora madre del Chapo Guzmán de nuevo acuda a saludarlo.
Ya son viejos conocidos. No nos extrañaría que sucediera de nuevo el famoso encuentro del cual fue testigo Quirino Ordaz Coppel hoy embajador de México en España.
Balazos y no abrazos, llegaron con singular alegría al medio día del 23 de los corrientes en el sector oriente de la ciudad capital del Estado de Sinaloa.
Los civiles de poderoso armamento pusieron a la ciudadanía y autoridades tirados de pancita en el pavimento.
Si el enemigo es poderoso, nos escondemos.
Cuando el enemigo esté fuera de nuestro alcance, ataquemos mis valientes, que para morir nacimos.
Felicitaciones a la guardia nacional y sus aliados.
No esperamos menos de ustedes.
Cumplan con las instrucciones presidenciales.
Bájense los pantalones y muestren sus posaderas a los muy queridos amigos delincuentes del comandante Andrés Manuel.
Hasta mañana.
J. Humberto Cossío R.

Comparte