Con esa mamufada nos salió Andrés Manuel en el que será (gracias a Dios) su último informe de gobierno.
Sigue el temor de que quiera quedarse y hacer a un lado a Claudia Sheinbaum con el apoyo de sus incondicionales de las fuerzas armadas.
Jodimos a Dinamarca en materia de salud nos dijo el dueño de la chingada.
De inmediato se notó en los 700 vuelos con quinientos pasajeros de Copenhague con destino a la ciudad de México.
Llegarán buscando los adelantos hospitalarios que superaron a su país y que proclamó Andrés Manuel.
“Nos pelan los dientes por aquellos rumbos”.
Nuestro presidente es un bárbaro y desvergonzado tabasqueño.
Le aplaudieron a rabiar sus invitados aunque por dentro sus carcajadas les pateaban el cerebro.
No puede ser, no puede ser, exclamé sin asimilar las estupideces del primer mandatario del país de las maravillas.
Los aeropuertos estarán saturados con tanto extranjero que aterrice para tratarse sus males.
“Quieren llegar a los hospitales de nuestro gobierno”.
“Vienen en busca de un milagro institucional de la salud”.
“Nuestro santo y reverendo padre les hizo llegar la esperanza”.
“A un lado Dinamarca y a buscar el México del águila y la serpiente”.
Caí de rodillas frente al televisor y me persigne doscientas treinta y cinco veces y recé un millón de padres nuestros y otros tantos de aves Marías.
Puse mi huipil frente a la tele para ver si se grababa la imagen de la virgen de Guadalupe junto al presidente.
Algo sucedió que no se hizo el milagro.
“Pero sigo creyendo en mi presidente y le prenderé veladoras para que me conceda sus bendiciones”.
Las lágrimas de emoción corrían por mis mejillas al tiempo que escuchaba el celestial mensaje de mi “adorado” primer mandatario.
Más de un ciego recuperó la vista con sus benditas palabras.
Los sordos escucharon con claridad que somos superiores a Dinamarca.
Alabado sea el señor de La Chingada.
Jamás he pedido un autógrafo. No quiero morir sin que nuestro amado presidente me estampe un pensamiento en mi camisa y lo firme para constancia.
Será lo más valioso que jamás haya tenido.
Los vuelos de Dinamarca a México generarán extraordinarias ganancias al Seguro del Bienestar.
Antes lo llamábamos Seguro Social.
Era un modelo para cirugías de grandes características y de bajos costos para no decir gratuitos.
Superiores a Dinamarca.
Gracias Andrés Manuel López Obrador.
Ya comenzó tu proceso de canonización.
Tu templo se llamará LA CHINGADA.
Hasta mañana.
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