Les adelantamos que el día de hoy se publicará otro brutal madrazo a los hijos corruptos de Rubén Rocha.
Nueva investigación periodística de Xpectro FM que es segunda parte de la nota con el título de “La banda sinaloense del gobernador Rocha Moya”.
Información obtenida en Miami pero también en nuestro país.
Documentos oficiales, incluso.
No podemos darles detalles, pero como señalo en pocas horas conocerán la información.
Se trata de descaradas evasiones millonarias al fisco y de relaciones de los Rocha Ruiz con empresas huachicoleras.
Los muchachitos salieron iguales de ladrones y ambiciosos que el papá, y puede que hasta peores.
No hay que ponernos al borde del derrame cerebral para encontrar de dónde saca tanta información privilegiada y de primera mano el colega Víctor Hugo Arteaga, uno de los investigadores de Xpectro FM.
Está claro que no fue a pasearse a Miami ni fueron casuales sus reuniones allá en el hotel Trump Doral con gente cercana a la asambleísta en la Cámara de Representantes María Elvira Salazar.
Ella es integrante de los comités de Relaciones Exteriores y de Pequeños Negocios en esa cámara del gobierno estadounidense.
Es muy cercana a Marco Rubio, Secretario de Estado del vecino país, y seguidora de Donald Trump que en los últimos años se ha preocupado por la seguridad nacional y la lucha de los Estados Unidos en contra de los cárteles mexicanos.
Con la pincelada de que es una periodista que ha ganado cinco premios Emmys.
Qué suertudote el colega Arteaga de tener acceso a datos y documentos que le permiten investigar a fondo el caso Rocha Moya.
Es cuestión de sumar dos más dos.
CÍNICAS LLORADERAS DE LA VIVIDORA YESENIA
Al retomar los señalamientos en contra de la vividora Yesenia Rojo, sucedió lo esperado.
Muy previsible, porque es lo mismo que ha hecho en los últimos años.
La farsante mandó de inmediato a sus lambiscones y aplaudidores para que la defendieran y atacaran a quien se atrevió a exhibirla.
Las mismas cantaletas de hace poco más de dos años, cuando decenas de personas la señalaron como ratera y extorsionadora.
Que “no hay pruebas”, que “son inventos”, que el periodista “está vendido”, etcétera.
Más de lo mismo, pues.
Robar y tirarse al suelo alegando que se le difama, aunque surjan de nuevo testimonios y pruebas.
Por eso su exigencia de que le agradezcan sus “éxitos” en la defensa de las viudas de policías y los agentes jubilados.
Mantener su máscara de luchadora social, para seguir robando.
Porque ella y su falso marido no saben hacer otra cosa.
Seguiremos con este círculo.
De nuestra parte y la de otros, probando que Yesenia es una vividora.
De parte de los rateros y sus cómplices, negando la realidad evidente.
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