Este muchacho murió a la tierna edad de 969 años y dejó varios descendientes en su larga carrera de matar a las pollas que se le ponían enfrente.
Por cierto, era abuelo de Noé el del arca.
Hijo de un tal Enoc y lo superó en años de existencia, ya que fueron 609 días más lo que vivió comparado con su señor padre.
Los antiguos nos venden historias que jamás podremos constatar y preferimos darlas por ciertas en la mayoría de los casos.
Cuando dialogo en el café con los de mi edad y otros que me superan con mucho y se dicen más jóvenes y con acta de nacimiento en mano, no dejo de asombrarme por la manera de conservación de su físico y aunque sabemos que la cirugía quita las arrugas más profundas, nos siguen asombrando con su aspecto.
Algunos de ellos, hasta se dan el lujo de decirme tío, que en el rancho significa el respeto para las personas de mucha edad.
Soy un tío de 77 años y hasta puedo ser padre de los de ochenta cirujiados y conservados en formól.
“Más sabio por viejo, que por diablo”
Y voltean a verme los jovenzuelos de ochenta para arriba sin mostrar el mínimo rubor por la quita de años de que hacen gala.
Me pregunto a cada momento:
“Corcholatas o Corchoratas” las que dio a conocer el patriarca matuselino que vive en Palacio Nacional, creyendo ser la reencarnación de Benito Juárez y con el manto de honestidad de Francisco I. Madero y Don Lázaro Cárdenas del Río.
¿Cuántos abriles se machaca Don Augusto López, Secretario de Gobernación y quién dicen es una copia facial del abuelo de la familia Monster?
¿Es Marcelo Ebrard un polluelo, o ya se practicó una barrida estética facial para no sentirse anciano?
¿Acaso la polluela Sheinbaum, no es tan polluela y se tapa con votox las arrugas que le brincan a la cara?
Viejo cabrón, el tal Augusto:
Vino, vio y comió por nuestras tierras y luego dijo que los sureños son más listos que los del norte.
Nos tachó de pendejos el abuelito.
Que” inge su maye” con todos y sus estúpidos seguidores.
Pinche vejete mal agradecido.
Eso nos pasa por ser cordiales con cualquiera.
Es “corchorata” envejecida y cuenta con mi repudio.
Y dicen que es el bueno en las preferencias de Matusalén López obrador.
Me queda la polla Sheinbaum y el potrillo Ebrard.
¿También son Corchoratas?
No lo sé, pero prefiero a este par, que al vejete que comió en el Mar& Sea y saludó a Don Juan S. Millán y sus compañeros de los viernes.
Sin embargo, sigo teniendo mis dudas de que Andrés Manuel quiera y logre quedarse en el poder, tal y como lo hicieron Hugo Chávez y Nicolas maduro en Venezuela.
Las fuerzas Armadas, felices de que su comandante en jefe siguiera al frente de este México nuestro.
Los negocios del ejército y la Marina viento en popa y sus ganancias son inmensamente fabulosas y corruptoras.
Las Corchoratas pueden ser otro distractor.
Hasta mañana.
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