Las cuentas alegres de Omar García Harfuch

Habla de una gran disminución de los homicidios en Sinaloa desde que se inició el gobierno de Claudia Sheinbaum.

Habla de un cabronal de detenidos y de grandes arsenales incautados a la delincuencia organizada.

Soy creyente, pero no tanto.

Me gusta para que sea el siguiente presidente de México.

Sin embargo, los que vivimos en Culiacán, nos sentimos temerosos de las acciones de Chapitos y Mayos y no ha bajado absolutamente nada el grado de miedo que llevamos por dentro.

Siempre me he preguntado el porqué no publican el número de serie de cada arma que decomisan.

Será que una y otra vez nos presentan las mismas armas y engruesan a placer lo que realmente decomisan.

Tampoco nos dicen que es lo que hacen con los cartuchos útiles que por miles nos avientan a la cara de diversos calibres.

Las toneladas de droga que forman parte de las estadísticas oficiales ignoramos si las queman o las venden, o se las pasan a sus elementos para que se animen a entrarle a los jodazos.

Debo de decirles que en una ocasión, un ministerio público federal de Los Mochis mandó con sus agentes un paquete sellado con determinada cantidad de cocaína al Juzgado penal que actuaba en auxilio del juzgado de distrito de Mazatlán.

El peso del paquete era el correcto y la secretaria les quiso dar por recibido y en ese momento se les indicó a los agentes por parte del Juez, que sería abierto el paquete y su contenido se mandaría analizar al centro de salud.

Los agentes pegaron un reparo y dijeron que no entregarían el paquete y reportarían el asunto a su jefe.

A las cuatro horas siguientes mandaron la consignación y ahora las bolsas abiertas y el contenido después de su análisis resultó ser cocaína pura.

Lo que tenía el otro paquete no supimos de qué se trataba.

Soy muy “sospechudo” y por eso dudo de la veracidad de los decomisos.

Que publiquen el número de serie del armamento decomisado y la pureza de los decomisos de droga.

Puede que así les crea.

Vuelvo a insistir que soy un enamorado sin remedio de María Sorté que es la mamá de Omar García Harfuch.

Deseo de todo corazón que este muchacho se convierta en el siguiente presidente de México.

Nada tiene que ver con Andrés Manuel López Obrador.

Por el contrario, el peje lo echó para abajo por Claudia Brugada, a pesar de ser el mejor evaluado de los contendientes para la jefatura de gobierno de la Ciudad de México.

Es el favorito de Claudia Sheinbaum.

Y de nosotros también a pesar de no ser parte de la cuarta transformación.

Repito que en Culiacán no se percibe mejoría alguna en lo que se refiere a la inseguridad.

Son cuentas alegres de Omar García Harfuch.

Hasta mañana.

Todas mis columnas en: https://altoparlante.com.mx/fax-del-fax/.

 

J. Humberto Cossío R.

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