Circula intensamente en redes sociales un audio en el que alguien que se identifica como parte de la “mayiza” amenaza matar a Rubén Rocha Moya.
“Hay que renunciar a ese Rocha Moya; toda esa bola de lacras que están tapando; hay que echarlos pa afuera; esa gente no sirve”.
En el lenguaje de ellos, renunciar significa matar.
Sin desmentido tratándose de algo tan fuerte, hay quienes toman como cierto ese audio.
Sobre todo porque es bien sabido que el gobernador de Sinaloa entregó a Ismael “El mayo” Zambada.
Esa parte del cártel de Sinaloa tiene razones de sobra en contra del góber traidor.
Qué pasaría, si de verdad los de la “mayiza” intentan renunciar a Rocha.
En los gobiernos local y estatal no hay capacidad para evitarlo, y en el federal puede que les caiga como anillo al dedo.
Muchas críticas ha provocado la gran cantidad de policías, militares, marinos y elementos de la guardia nacional que protegen a don Rubén, con el pueblo abandonado a su suerte.
No duden mis apreciados lectores que el kakas quiere que le hagan ese favorcito para eliminar al estorbo sinaloense.
Hacer como que confrontan, pero permitir que Rocha Moya sea renunciado porque significa eliminar esa papa que está ardiendo y que se convirtió en una gravísima amenaza contra el narco presidente y la narco sustituta.
Como dicen en ese mismo audio, se hará lo que decida “El mayo” Zambada.
TERROR EN SINALOA; AMLO, MUY COBARDE
Contra los otros datos oficiales de siempre, padecemos un Sinaloa de terror y un Andrés Manuel López Obrador muy cobarde.
Miles de sinaloenses, principalmente de Culiacán, vivimos encerrados en nuestras casas saliendo sólo cuando no queda de otra.
Hoy más que nunca en nuestras calles se roba, secuestra, despojan vehículos y se asesina.
No hay ley, más que la de los delincuentes.
Por eso gran cantidad de negocios cerrados o trabajando solamente unas horas, con miles de familias en apuros porque viven al día y se quedan sin ingreso para los alimentos.
Nos quieren matar de la risa con los reiterados atoles de que el gobierno tiene con qué detener la violencia, mientras simulan con el mayor de los descaros.
Que llegaron refuerzos, aviones y helicópteros artillados, etcétera, etcétera.
No obstante lo anterior, el presidente de la república sigue con sus irresponsables maromas de que la violencia que sufrimos “no es un asunto mayor”.
El incumplimiento de sus obligaciones por darnos la seguridad que exigimos y merecemos, y la cada vez más obvia complicidad cobarde a favor del crimen organizado.
A ver si alguien les recuerda la “solución” de acusar a esas gentes con sus abuelitas.
La presirvienta Claudia Sheinbaum tiene todavía dos semanas más para seguir haciendo el ridículo, mientras asume la presidencia.
Con la duda de si ya con el “poder” continuará de rodillas ante el dictador macuspano.
Recordemos que repetidamente ha dejado muy en claro que seguirán los abrazos a los criminales.
Es abuelita de Batman, porque traicionar ese pacto tendría una respuesta brutal de parte de los malos.
A lo que más temen en la cuatroté es a que los narcos suelten la sopa.
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