Mi percepción respecto al perfil político del Presidente Andrés Manuel López Obrador, es el de un político inteligente, irónico y sagaz.
Además es astuto y ladino, dicen otros; Y no faltan los que lo etiquetan de cínico y muy zorro.
Son desde mi punto de vista, etiquetas personales que en efecto distinguen a nuestro personaje, distintivos que en conjunto lo han llevado a conquistar la marca registrada AMLO.
Indudable es, que inteligencia y astucia, el Presidente las ha convertido en herramientas con las cuales ha sabido jugar, sortear, evadir, y vencer retos y adversidades que en el ejercicio de su gobierno se le han presentado.
Sin embargo, quiero pensar, que sin el cinismo y sin la ironía como armas de defensa que también lo distingue, le sería más difícil acotar los grandes cuestionamientos de la prensa y los ataques de sus adversarios políticos.
Señor Presidente, preguntó la mañana de este martes 6 de septiembre una reportera:
¿Usted había dicho en su campaña política que en 6 meses regresaría a sus cuarteles a los militares; ¿Ya cambió de opinión?.
“SÍ, YA CAMBIÉ DE OPINIÓN, respondió sin rubor, de manera seca y frontal el propietario absoluto de la marca AMLO.
Tras su respuesta al cuestionamiento de la prensa, es evidente la manera inteligente, en que el mandatario nacional con un juego de palabras, le moja la pólvora a sus contrarios.
El promotor de la Cuarta Transformación, busca neutralizar los dardos venenosos que por todos los rumbos sus detractores le están lanzando, sobre el tema de la militarización del País.
Insisto, con inteligencia y astucia, combinadas con una interesante dosis de cinismo, la marca AMLO logró ésta mañana restar efectividad a los ataques enemigos.
Y lo pudo lograr, tan solo con aceptar que, en efecto, en campaña dijo que regresaría a los militares a sus cuarteles, pero, ya cambió de opinión…
¿Así o más claro?…Aunque, era de esperarse, las rabietas de los críticos se han dejado sentir, pero consientes quizá, que las municiones irán mermando y con ello también los ataques hacia ese flanco político del ejecutivo federal..
EL INADVERTIDO DESTAPE DE CLAUDIA SHEIMBAUN
Por cierto, hablando de las habilidades que distinguen a la marca AMLO al momento de hacer política, habría que observar un hecho ocurrido durante el evento de su cuarto informe de gobierno.
El Presidente ordenó sentar en primera fila y en el centro de la misma a sus tres “corcholatas”.
Es decir, sus tres Pre –candidatos a sucederlo en la Presidencia de la República que él mismo ha destapado; Dígase, Marcelo Ebrard, Claudia Sheimbaun y Adán Augusto López.
Ante ese hecho, una preguntas se hace necesaria;¿Y qué interpretación se le puede dar al acomodo de las fichas presidenciales en un espacio tan privilegiado del salón del citado evento?.
Mi análisis personal es sencillo; AMLO sentó a su preferida en el centro de la primera hilera, y flanqueada además, por sus dos adversarios en la lucha por la candidatura presidencial de MORENA.
A Marcelo y Adán Augusto, el Presidente pudo haberlos acomodado en lugares preponderantes, dada la investidura de funcionarios de primer nivel que ostentan, sin embargo, era necesario ponerlos a los costados, cual escoltas de Doña Claudia, para hacerles entender quizá, quién es la “Soberana”.
El Presidente no invitó a su cuarto informe a los restantes 31 gobernadores de los Estados de la República, sin duda con la idea de hacer brillar a la mandataria de la Ciudad de México.
Algunos analistas consideran que la gobernadora de la ciudad Capital, estuvo invitada y acomodada en un lugar privilegiado, por su calidad de anfitriona, y quizá tengan algo de razón.
Otros que han querido justificar el desaire de la Presidencia de la República a los 31 gobernadores, alegando que el espacio del salón resultaba insuficiente para acomodarlos.
Sobre éste argumento, desde mi personal punto de vista, creo que si el Presidente López Obrador hubiera deseado invitar a los gobernadores, los responsables de la logística del evento, sencillamente habrían recibido la orden de elegir un salón más amplio.
Sin el afán de hacerle al pitoniso, creo que el Presidente diseñó muy bien su estrategia, para enviar el mensaje a quien quisiera leerlo, que ya ha seleccionado a su “corcholata”.
Y es que, sabedor de que los 31 gobernadores no estarían presentes en su informe, el pretexto de la anfitrionía de Claudia Sheimbaun le quedaba como anillo al dedo para invitarla y ponerla frente a los reflectores.
De otro modo, si AMLO hubiera invitado a los 32 mandatarios estatales, se habría quedado sin la posibilidad de instalar a la jefa del gobierno capitalino en la primera fila y flanqueada por los dos “CORCHOLATOS”.
Y es que, por protocolo y ante la necesidad de un trato igualitario, la tendría que haber acomodado en un espacio pre determinado junto al resto de sus homólogos.
Mi conclusión; El Presidente sacrificó la asistencia de los 31 gobernadores, con el propósito de contar con la libertad de mostrar a los mexicanos y más “allacito” de nuestras fronteras, el rostro de la mujer que pretende sea su sucesora de los mandos de la Nación mexicana… Es decir, Claudia Sheimbaun Pardo…Más claro, ni el agua.
Así lo veo yo, pero se valen opiniones… Nos vemos enseguidita.
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