Y Andrés Manuel López Obrador luce desconcertado ante las acometidas de los que no están de acuerdo con su manera de gobernar.
Ya no puede burlarse del número de ciudadanos que se convocan y acuden para decirle al gobierno aquí estamos para defender nuestros derechos.
El Zócalo de la ciudad de México se llenó el domingo de ese pueblo que no tolera a los dictadores.
Su desgastado discurso que son los representantes del conservadurismo no tiene la fuerza de sus primeros años.
Lo están rebasando con las marchas y los gritos de fuera López y NARCO PRESIDENTE le taladran los oídos y le corroen el alma.
Xóchitl Gálvez debe convocar en las calles a los ciudadanos y que su mensaje se escuche claramente en los lugares que visite en su campaña.
No debe permitir que la programen en lugares cerrados donde solo unos cuantos la acompañarán.
La calle es un especial lugar para que sus palabras se distribuyan a los cuatro vientos y que los asistentes midan y calibren la fuerza de sus mensajes.
Xóchitl es de poderosa y convincente voz.
Por eso debe tomar la calle y ser escuchada.
Hoy registrará su candidatura y desde el primero de marzo se lanzará en pos de lograr un triunfo que la lleve a la presidencia de México.
No puede perder un solo segundo para buscar los votos en todo el territorio nacional. La fuerza de su equipo y las estructuras de los partidos que la cobijan, tienen que marchar en plena coordinación para lograr el triunfo.
No hay mañana y tampoco lugar para el descanso.
No tiene derecho a enfermarse.
De su garganta deben salir los truenos en contra del que pretende convertirse en dictador y avasallarnos a los que no estamos de acuerdo en sus torpezas.
En tres meses deberá unir y convencer a los ciudadanos que su proyecto es lo que requiere nuestro país.
Xóchitl le mete miedo al tirano de palacio nacional.
Debe seguirlo haciendo sin descanso y apabullar a su contrincante que viene lanzada por Andrés Manuel.
La ciudadanía ha tomado la calle y tiembla el presidente.
Ya no puede decir que son unos cuantos los inconformes.
Xóchitl llevará el estandarte de los muchos millones que repudiamos la manera en que pretende dividir a los mexicanos Andrés Manuel.
Xóchitl será la voz de los niños con cáncer.
Será la que proclame el apoyo irrestricto a las madres buscadoras de sus hijos que tienen que pedir permiso a la delincuencia para seguir escarbando.
Es la esperanza para lograr que los mexicanos nos sintamos seguros y que nuestros hijos y nietos gocen de una vida plena.
La cuarta transformación apesta y nuestro voto será el jabón que utilizará Xóchitl para que tengamos un gobierno digno sin confrontaciones.
Los gritos de NARCO PRESIDENTE son lanzados con bastante frecuencia por la ciudadanía y son escuchados esos clamores por nuestros vecinos del norte.
Claudia Sheinbaum no se siente segura.
Ella también es investigada por nexos con la delincuencia organizada y en su momento puede ser levantada y llevada a juicio.
Es muy significativo lo de NARCO PRESIDENTE.
La gente no se oculta para gritarlo.
Hasta mañana.
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