La bola ensalivada

Es una manera ilegal en el beisbol profesional y que puede dar lugar a sanciones de expulsión del juego, multas y hasta la expulsión definitiva de la temporada.

También puede dar lugar a ser proscrito de por vida de los diamantes de las ligas mayores que tanto nos gusta seguir.

Dos grandes maestros del lanzamiento.

En los años 30 “Doubble Dutty Redcliffe”.

Más reciente, y muy famoso por grandes hazañas y ser parte del salón de la fama, Gaylor Perri que fue el primer pitcher en ganar el trofeo Cy Young en ambas ligas.

Lo hizo con Cleveland en 1972 y con San Diego en 1978.

Increíble que lo haya ganado a la edad de 40 años.

A pesar de haber jugado beisbol, jamás me enseñaron a trucar el modo de lanzar con las sustancias prohibidas.

Creo que eso se aprende cuando eres profesional.

Es peligroso el lanzamiento al no ser controlado al cien por ciento y puede causar una lesión grave al bateador impactado.

En la política, hemos tenido y tenemos, profesionales que utilizan conocimientos deportivos para lanzar sobre nuestra humanidad el horroroso Spit Ball.

Roberto Madrazo fue un señorón para ponchar contrarios y en cualquier competencia se hacía presente con sus trampas.

Fue expulsado de una competencia internacional, por pretender engañar al jurado al cruzar la meta sin haber corrido o caminado el trayecto completo.

Hace algunos años que nos dejó su marca.

Ahora tenemos su relevo.

Se supone que Andrés Manuel es un respetable toletero amateur y se ha mostrado en su calidad de presidente de México, como el más grande entre los grandes de los lanzamientos envenenados.

Le vale madre pegar en la cabeza o quebrar extremidades y costillas.

Juega sin ampáyer, o si le ponen uno, no acata sus decisiones.

Se burla de los equiperos contrarios.

Si son resistentes, les confisca hasta los uniformes.

Chiquito ha dejado al compa Madrazo.

Aprendió sus marrullerías y las aplica en nombre de su transformación para beneficiar al pueblo honesto y bueno.

Gaylor Perry sería un insignificante aprendiz al lado de nuestro “amado peje”.

Mi presidente le pone saliva, grasa o lima la pelota con instrumentos que puede mostrar sin recato alguno.

Se sabe intocable y quiere ser elegido para el salón de la fama de los bribones Mexicanos.

Lo elevarán sin rival alguno.

Nos salió peor de mañoso que García Luna.

Nada lo detiene y sus locuras las cobija con sus otros datos.

No sabemos si se bajará de la loma de lanzar.

Es dueño del bat, la careta, manillas y pelotas.

Hasta mañana.

Todas mis columnas en: https://altoparlante.com.mx/fax-del-fax/.

 

J. Humberto Cossío R.

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