Sobre el Camino

La autocracia zarista

u muerte es ocasión para pensar en las razones por las que el comunismo quedó fuera de la historia.

Nada nos ha sorprendido tanto del comunismo como la forma en que ha salido de la historia. La muerte de Mijaíl Gorbachov es ocasión para reflexionar sobre las razones por las que el comunismo quedó fuera de la historia.

Salió solo. No fue una derrota militar. Fue el reconocimiento de que el sistema no funcionaba. Ni en lo económico ni en lo político.

En lo económico trató de sustituir el mercado por la planificación centralizada. En el papel parecía una idea razonable. Parece más sensato planificar los bienes y servicios que una sociedad requiere y organizar su producción desde el Estado. En la realidad no funcionó.

En lo político abolió los derechos de libertad de opinión, de asociación, de propiedad. Y esa abolición no dio lugar a una sociedad mejor. Si bien dio lugar a un nivel de bienestar económico básico, eso no pareció ser suficiente para tener una vida humana decorosa.

No es, desde luego, que sus adversarios, las democracias con economías de mercado, sean perfectas. Están muy lejos de la perfección. ¿Habrá alguna sociedad humana que se acerque a ese ideal? Pero son preferibles por diversas razones.

Ciertamente hay que reconocer el efecto positivo que el comunismo tuvo sobre el mundo. Puso en el centro de la agenda pública la cuestión de la pobreza y la desigualdad. Los países que ahora son vistos como ejemplos de sociedades, los nórdicos, recuperaron esa agenda. Combinaron la intervención del Estado con la lógica del mercado y resolvieron muchos de sus problemas. Dieron lugar a sociedades prósperas y equitativas.

La caída de la Unión Soviética, decretada por Gorbachov, dio lugar al concepto de gobernanza: los gobiernos no pueden gobernar solos. Requieren del mercado y de la sociedad civil.

Vemos ahora, con la invasión a Ucrania particularmente, intentos de recuperar el Imperio Ruso, pero no el sistema soviético. Para algunos historiadores se trata de estructuras de larga duración: Stalin fue un zar rojo. Putin¿zar rosa? El sistema soviético se combinó con la autocracia zarista.

GOTITAS DE AGUA:

Hay quienes muestran simpatías por el régimen ruso actual. Que justifican, directa o indirectamente, la invasión a Ucrania. Entre ellos miembros de partidos de izquierda. ¿Simpatizan con la reconstrucción del Imperio Ruso? ¿En qué sentido? Porque en el régimen de Putin no parece haber nada de los valores que se consideran de izquierda. “Si cierran la puerta, apaguen la luz”. “Nos vemos Mañana”…

 

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Benjamín Bojórquez Olea

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