De nuevo, el recién comenzado gobierno estatal aparece como candil de la calle y oscuridad de la casa, pues a pesar de que descuenta religiosamente a casi siete mil trabajadores la cuota del Instituto de Pensiones del Estado de Sinaloa, tiene tres meses que no paga la prima de permanencia que por ese concepto se genera a favor de quienes teniendo 50 años o más de vida continúan laborando y tienen pendiente su jubilación.
El descuento de la cuota IPES aplica a todos los sindicalizados, y varía de los 800 hasta los siete mil pesos por mes según lo que cada trabajador tiene como ingreso, lo que con un promedio muy conservador nos lleva a un global de descuentos que mensualmente supera muy fácilmente los diez millones de pesos.
Parte de ese dinero es precisamente para pagar la prima de permanencia, pero por primera vez en la historia esta prima se suspendió; la actual administración pagó el 17 de diciembre la correspondiente al mes de noviembre, y desde entonces anda “perdido” el dinero correspondiente.
Nos aseguran que el número de empleados afectados es de cuando menos quinientos, quienes dejaron de recibir su prima y vieron reducir su ingreso a casi la mitad.
Si con el salario completo apenas alcanza para sobrevivir, imaginen ustedes lo que ahora sufren.
Desde el primer pago no recibido, en cada centro de trabajo el problema fue expuesto directamente ante los delegados sindicales y se llevó a los altos mandos del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Estado.
Sin embargo, el problema continúa y a los trabajadores se les sigue descontando la cuota sin que se les pague la prima, mientras en el STASE se les asegura que están gestionando una solución que sigue sin llegar.
A mediados de febrero y cansados de no ver solución al problema, un grupo de afectados abordó al ejecutivo estatal Rocha Moya, quien prometió resolver la injusticia pero lo que le entró por un oído terminó saliéndole por el otro.
Lo de candil de la calle y oscuridad de la casa lo señalamos con mucha razón por lo que el ejecutivo estatal dijo muy digno durante su conferencia semanera del día siete de febrero, con condenas muy duras contra los gobiernos anteriores que descontaban dinero a los trabajadores sin devolverlos, y a un sindicato -SNTE 53- que fue muy disimulado frente a los malos manejos de los dineros de sus representados.
Los hechos están ahí, con esa doble moral de Rubén Rocha que critica que otros hagan algo mientras él hace exactamente lo mismo.
A ver con qué maromas sale para fingir que nadie lo enteró o que ni caso le hicieron.
UNA DAMA QUE DEJÓ HUELLA
Rosalía Camacho de Aguilar hizo historia como presidenta del DIF Sinaloa durante el gobierno de su esposo.
Dejó una huella que muchas familias recordarán por sus esfuerzos a favor de la salud y la vida de los sinaloenses, con énfasis especial en las mujeres y los niños. Descansa en paz, comadrita; un abrazo solidario con mi más sentido pésame, compadre Jesús Aguilar.