Lo adelantamos con muchos meses de anticipación y está hoy plenamente confirmada esa farsa de instituto de “protección” a periodistas que sólo simula y roba.
Cuántos ingenuos o de buena esperanza se fueron con la finta, a pesar de las advertencias que hicimos sobre las reales intenciones de quienes estuvieron detrás del proyecto.
Como estaba previsto, el gobierno impuso mayoría a favor desde el Congreso del Estado.
Hay en ese instituto una mayoría de consejeros desvergonzados y arrodillados ante el poder.
Demostraremos aquí el arrodillamiento con dos comunicados públicos del instituto firmados por su presidenta Jhenny Judith Bernal Arellano.
El 5 de agosto pasado, la petición a Rubén Rocha Moya para que “siga siendo un aliado de los periodistas y los defensores”.
De ese tamaño el ridículo público, en medio de las andanadas de insultos y descalificaciones por parte del gobernador a periodistas y medios de comunicación.
Y ante el escándalo más reciente por parte del ejecutivo estatal, el remate del comunicado de ayer que no menciona para nada a Rocha como el agresor.
La generalización de que se “rechaza contundentemente cualquier expresión de denostación contra periodistas, defensores y medios de comunicación”.
La simulación y la cobardía están muy claras.
Se defiende y protege a Rubén Rocha, aunque sea el agresor.
Y los periodistas agredidos que se aguanten porque según dice el instituto en uno de sus comunicados, el gobernador se distingue por su compromiso humanista.
Simular y robar, señalamos en el título de este Altoparlante.
Lo del robo sucede porque se gastan dinero del pueblo sin cumplir con lo que las leyes les mandan.
Precisemos que los seis consejeros de este instituto no cobran salario alguno.
De esta media docena, reconozcamos a dos que sí trabajan por el cumplimiento de sus obligaciones: Rosina Ávila Palma y Alberto Morones Rivas.
Los restantes cuatro son una decepción.
Comencemos con la bandida María Isabel Cruz Bernal, comprada desde hace tiempo por el gobierno estatal.
Junto con Juan Mario Martini Rivera y Aldo Ruiz González, van de la mano con la presidenta Jhenny, votándole siempre a favor.
Dejamos al último a Griselda Inés Triana López, que comenzó enjundiosa y ahora es parte de esas simulaciones y robos encabezados por la “jefa”.
La decepción mayor, sin duda alguna, por el recuerdo de Javier Valdez Cárdenas, quien fue su esposo.
Este jueves hay sesión mensual del consejo.
Hace días, seis consejeros de la Comisión Nacional de Derechos Humanos renunciaron a sus cargos.
Protestaron así por las amenazas y calumnias de la presidenta Rosario Piedra contra algunos de esos integrantes del consejo consultivo, y por su negativa a acatar resoluciones tomadas por unanimidad.
Las similitudes con el instituto local son evidentes, aunque en este caso sea con una aparente minoría.
Dos presidentas arrodilladas al poder político, dictadoras y simuladoras.
Hoy hay sesión mensual de consejeros en el instituto sinaloense de protección a periodistas.
Seguramente habrá reclamos y controversias internas.
La duda es hasta dónde llegarán los consejeros que no están de acuerdo con un instituto que está visto no cumple ni siquiera mínimamente con su función.
Mañana les comentamos.
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