Los alcaldes no tienen dinero, los alcaldes no tienen dinero, los alcaldes no tienen dinero. Ese es el grito que marca una realidad.
El problema es que el Estado tampoco tiene el dinero que tenía antes y que le permitía ayudar a los municipios.
Nomás para darse una idea. El Gobierno Municipal de Ahome que encabezó Alvaro Ruelas, bajó más de 2 mil millones de pesos en obras y programas de beneficio social, adicional al presupuesto asignado y aprobado.
Los recursos eran federales y estatales. Las obras se vieron y aun son de beneficio social. Carretera a Topolobampo, a la Villa de Ahome, construcción de la zona 30 y la remodelación del centro histórico o comercial de la ciudad, solo por mencionar algunos de muchos. El Gobierno de Billy Champan ya se distinguió por la ausencia de obra social.
Así, se vieron obras sociales en cada uno de los 18 municipios de Sinaloa. Quirino Ordaz en los dos primeros años de gobierno, bajó 13 mil 500 millones de pesos adicionales a su presupuesto local.
La gran cantidad de obra realizada y sin pedir prestado, le sirvió para legitimarse en los hechos, o sea a base de resultados. Esa legitimación a base de obra social le alcanzó para aguantar sin dinero para hacer más obra social sus últimos tres años de gobierno que fueron los 3 primeros de Andrés Manuel.
Hoy la situación parece haber empeorado. Salvo Mazatlán y Culiacán, municipios que registran mucha obra privada, el resto de los municipios se enfrenta a un gran problema. No tienen dinero para impulsar el desarrollo que la sociedad demanda.
Y la gran pregunta que muchos se hacen. ¿Cómo van a legitimar los alcaldes sus respectivos gobiernos? Con que ojos divino tuerto, dice el popular dicho cuando se carece de dinero para comprar algo.
1.-Los alcaldes han empezado a presentar sus respectivos Planes Municipales de Desarrollo. La gran mayoría copia el nuevo modelo que distingue al Plan Estatal de Desarrollo. No trae indicadores para ser medible ni presenta la visión y proyección de obra de infraestructura que impulse el desarrollo de la entidad.
¿La explicación para tal omisión? Que los Estados no tienen dinero y los gobernadores prefirieron no hacer compromisos que evidentemente no tienen certeza de cumplir.
El gobierno federal tiene concentrado el recurso en sus programas sociales y en las tres megaproyectos del Presidente Andrés Manuel.
2.-En el caso de los municipios la realidad se pone peor. Los alcaldes no tienen dinero suficiente para impulsar mucha obra social. Dependerán en gran parte de lo poco que les lleve el Gobierno del Estado. En pocas palabras, los alcaldes lucen ahorcados financieramente.
3.-Nomás para darnos un ejemplo de la nueva realidad. Cuando Malova fue alcalde de Ahome, presumió que su gobierno hizo una obra diaria y le entró al reto de superar la obra de pavimentación de su antecesor, que este hizo lo mismo que su respectivo antecesor.
Malova implementó el indicador de la medición de un gobierno en base a la obra social que realizaba. Es a través de la obra pública o social, como se mejora en realidad la calidad de vida del pueblo. Hoy, la realidad es diferente.
4.-Si se revisan las agendas de los alcaldes, ya parecen agentes de relaciones públicas. Se la pasan firmando convenios, asisten como invitados a cualquier evento, organizan festividades o hay quienes prefieren asumir su pose de peleonero para lograr que se hable de ellos en los medios de comunicación y saber que existen, para no pasar desapercibidos o como simples fantasmas.
5.-Así han transcurridos los primeros seis meses de los nacientes gobiernos. El gobernador Rocha ha anunciado que ya van a empezar las licitaciones de obras. Hay que ver cuales se hacen en cada uno de los 18 municipios. A los alcaldes les urge legitimarse en los hechos como un buen gobernante y al propio gobernador también.
Dar resultados en lo tangible, o sea en obra social que impulse desarrollo, más allá de lo que el pueblo recibe en apoyos o becas, se ha vuelto ya una necesidad. El pueblo empieza a extrañar lo que antes tenía y que ahora ya no.
La carencia de obra pública en los municipios durante los últimos 3 años y medio ya es visible ante los ojos de muchos sinaloenses.
Habrá que estar pendientes.
PASO A PASITO.-El periodista Marcial Pompa Guillén presentó ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos una queja en contra del alcalde de El Fuerte, Gildardo Leyva por las supuestas agresiones recibidas y las amenazas vertidas supuestamente por el alcalde de “tener muchas ganas de romperle el ocico a un periodista.
Veremos que hace la CEDH que también se empieza a notar se su ausencia.
OTRO PASITO.-Como que en el PRI de nuevo se calientan los ánimos. Son muchos los que quieren el partido y es solo un puesto lo que actualmente está en juego. El de presidente sustituto.
¿Quién será el presidente sustituto? El que sea no la tendrá fácil. La disputa es quien se queda con el PRI o a quien se lo entrega Alito Moreno.
La decisión será local. ¿Y sí es local quien se beneficia y cuál sería el futuro del PRI? ¿Para quién trabajaría?
Y si la decisión es nacional. ¿A quién beneficiaría y cuál sería el futuro del PRI en Sinaloa? ¿Para quién trabajaría?
Ahí está el dilema.
UN PASITO MAS.-Hoy el Gobernador Rubén Rocha firmará un acuerdo de colaboración con el INFONAVIT. Estará en Sinaloa, su director general, Carlos Martínez Velázquez.
Veremos que beneficio les trae a los sinaloenses.
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