Por pisotear los derechos de los trabajadores, denuncian en juzgado a un hermano del chaquetas.
De manera anónima porque tienen mucho temor de las represalias de quien es administrador del Juzgado de primera instancia de control y enjuiciamiento penal de la región Centro-Norte del Estado, con sede en Angostura.
Se acusa que Javier Inzunza Cázarez tiene casi dos años actuando con enorme prepotencia y arrogancia.
Acoso laboral permanente, con un lenguaje grosero y vulgar.
Que puede mover o quitar a quien se le pegue la gana, amenaza a cada rato.
Le harán lo que el viento a Juárez si alguien se queja, advierte, porque tiene todo el apoyo de su hermano Enrique, el Secretario General de Gobierno en Sinaloa.
O se alinean o se friegan, repite lleno de soberbia.
“Pedimos de la manera más atenga que atiendan nuestro llamado; que no nos ignoren porque estamos desesperados”, señalan los quejosos.
Preguntan “qué más tiene que pasar para que revisen la situación del juzgado; a quién más va a afectar; a quién más va a despedir; a quién más le va a arruinar la vida este señor para que reaccionen”.
Hay una sola persona que cuenta con impunidad en el juzgado, y arguyen razones sentimentales.
La denuncia ante la opinión pública surge en la desesperación de que nadie escucha las quejas.
Javier Inzunza actúa con total impunidad, y lo presume.
Hace algún tiempo nos comentaron externamente de abusos cometidos por el influyente administrador del juzgado, pero hasta hoy tenemos algo más concreto.
No hay que ponernos al borde del derrame cerebral para saber que harán todo lo posible para seguir protegiendo al abusivo administrador.
Si alguien se atreve a preguntarle al gobernador, dirá que es un poder “independiente”.
Y difícilmente se quedará con las ganas de defender al acusado.
Sobradamente ha demostrado que ama con locura al tristemente célebre “chaquetas”.
NO QUIERE AUTONOMÍAS, EL RABIOSO PRESIDENTE
Que intentará desaparecer todos los organismos autónomos, fue la reacción de un furioso Andrés Manuel ante la exhibida de sus hijos corruptos.
Por eso no quiere que haya transparencia.
Que no podamos conocer cómo se gastan los dineros públicos, porque salen a la luz las raterías cometidas.
Pretende también demoler el instituto y el tribunal electoral.
Apoderarse de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, mediante el voto “popular” de magistrados y jueces.
Claudia Sheinbaum va en lo mismo, porque se lo ordena el patrón.
Sin recato, quieren destruir por completo a la república y a sus instituciones.
No se conforman con robar a lo tonto, sin llenadera.
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