Contratista cuatroté mil usos que ni la NASA tiene

Nos acabamos de encontrar un contratista cuatroté mil usos que ni la NASA tiene.

Una comercializadora que merecería reconocimiento mundial por todo lo que hace y puede hacer, según las formalidades y los contratos.

Cada quién tendrá su opinión personal, con la información que les compartiremos.

Jesús Ramón Mendívil Castro está casado con María Rebeca, a cuyo nombre tienen un negocio de venta de helados.

Aparte de esta empresa familiar, Mendívil Castro está registrado ante Hacienda con ocho actividades económicas diferentes.

Comercio al por mayor de otras materias primas para otras industrias; construcción de obras de urbanización; comercio al por mayor de productos farmacéuticos; comercio al por mayor de artículos de papelería para uso escolar y de oficina.

Además, construcción de vivienda unifamiliar; construcción de vivienda multifamiliar; comercio al por mayor de equipo y accesorios de cómputo, y construcción de naves y plantas industriales.

El domicilio registrado ante el Sistema de Administración Tributaria es el de bulevar Emiliano Zapata número 1585 en Culiacán.

Y comenzamos con los enredos.

En gran cantidad de sus contratos señala un domicilio fiscal distinto, calle Nayarit número 515 en la colonia Antonio Rosales de Culiacán.

En la página de transparencia nacional, una búsqueda con el nombre de Jesús Ramón Mendívil Castro nos lleva a numerosos contratos en los que se señala ese domicilio de la colonia Rosales.

Una inspección física demostró que el negocio no existe; la cuadra comienza con el número 533, junto a un Oxxo que está ubicado en la esquina pero con frente en la calle Ignacio Aldama.

Información publicada por el periódico Noroeste señala que este proveedor consiguió 26 adjudicaciones directas del ayuntamiento de Mazatlán por concepto de medicamentos.

Un total de 14 millones 248 mil 945.46 pesos, con el detalle de por lo menos una factura cobrada pero cancelada ante el SAT, por casi 400 mil pesos.

Aquí puede usted ver más detalles:

https://www.noroeste.com.mx/culiacan/gobierno-de-mazatlan-pago-mas-de-300-mil-por-medicamentos-en-una-factura-cancelada-ase-NX5011816.

Otro cliente frecuente del contratista es la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de Culiacán, y en los contratos aparece reiteradamente el domicilio fiscal inexistente.

Ya con este importante detalle es evidente una irregularidad recurrente que implicaría contratos ilegales y a modo.

Las adjudicaciones directas con “moches” y empresas que se prestan a las transas son modus vivendi en los gobiernos de la cuarta transformación.

Y en el caso de este contratista mil usos con un domicilio fiscal “fantasma”, tenemos que acogernos al proverbio popular de piensa mal y acertarás.

Todas mis columnas en: https://altoparlante.com.mx/altoparlante/.

 

Partida
Juan Manuel Partida Valdez

Comparte