Ruth Díaz Gurría: ¿renuncia o destitución?
= Sorpresiva decisión del gobernador Rubén Rocha Moya. = No hacer equipo con sus subsecretarios, la causa, dicen = ¿Mensaje para secretarios en situación similar? = Carácter, decisiones rápidas y mano dura del mandatario = Tatiana Clouthier y su exhibida por parte de López Obrador Una diferencia muy marcada entre un comunicado de prensa y el otro, con diferencia de poco más de una semana: en el que se refiere a la salida de Héctor Melesio Cuén Ojeda como secretario de salud del gobierno del Estado, se habla de destitución, de una manera concluyente; por lo que respecta al que informa del cambio en la secretaría de Bienestar y Desarrollo Sustentable, solo se da a conocer el arribo de una nueva titular, sin mayores detalles. Más lacónico, imposible. Esto trae como derivación directa una duda imposible de pasar inadvertida: ¿renunció Ruth Díaz Gurría o la cesó el gobernador, como lo hizo con Cuén? Lo cierto es que Ruth Díaz abrió la jornada laboral del viernes próximo pasado como titular de la SEBIDES -condición en la que, incluso, había asistido a un acto oficial – y por la tarde ya estaba fuera del gabinete de Rubén Rocha, hombre de decisiones más que rápidas puesto que inmediatamente nombró a su sucesora: María Luisa Pérez Corral. Igualito a como lo hizo con Héctor Melesio. Precisamente en el curso de la mañana, Rocha Moya había ventilado algo de lo que sucedería más tarde al comentar con los periodistas de la fuente -tras la presentación de la colección literaria “Dámaso Murúa”, en el Palacio Legislativo – de la existencia de secretarios que tienen “congelados” a sus subsecretarios (presumiblemente por no pertenecer a su círculo cercano de afectos) y que por esa razón es que no avanzan en el cumplimiento de sus programas de trabajo, a un ritmo acorde a las exigencias del mandatario. Todo un algodón de azucar para los señores reporteros, quienes preguntaron al unísono “¿Quién?” a lo que Rocha, simplemente contestó: -Ruth. Y aceleró el paso para evitar mayores cuestionamientos. O sea, como se dice en el argot común el gobernador dejó “la víbora chillando”; pero nadie, ni el más sagaz de todos los periodistas pudo visualizar lo que acontecería apenas unas horas más tarde. ¿Ruth Díaz Gurría no pudo asimilar la exhibida pública por parte del mandatario y dimitió de inmediato o Rocha traía ya delineada la ruta crítica a seguir? Esto llama mucho la atención porque Ruth fue, de hecho, la primera en ser presentada como parte del gabinete gubernamental -allá por septiembre del año pasado – y ponderada como un firme valor sinaloense en la especialidad, además de sus sólidas relaciones en las altas esferas del gobierno federal. Ruth, entre paréntesis, es hija del doctor Víctor Díaz de la Vega (eminente cardiólogo sinaloense), sobrina de José Angel Gurría Treviño (por muchos años secretario general de la OCDE) y nieta de José Angel Gurría Lacroix, también distinguido sinaloense. Como “haiga sido” -como dijo el otro- de lo que no hay la menor de las dudas es que se trató, a final de cuentas, de una decisión, toda ella, de Rubén Rocha Moya. Y que en el curso de las últimas dos semanas, quedó ratificado que al “gober” le pesa la mano y que no andará con contemplaciones de ninguna naturaleza en situaciones similares. De paso, una llamadita de atención, una advertencia velada para otros secretarios y secretarias del gobierno del Estado. Hay por ahí, algunas y algunos que simple y sencillamente no pelan para nada a sus subsecretarios o subsecretarias, a pesar de que saben y entienden muy bien que, independientemente de donde vengan y si son militantes de MoReNa o no lo son, si están ahí es porque el gobernador Rocha así lo decidió. Y punto. Suyos los comentarios, amigo lector. -0- Por cierto. Quien también vivió una situación similar, en el curso de la semana, fue Tatiana Clouthier Carrillo, secretaria de Economía del gobierno federal y persona muy cercana a la esposa del presidente de la República y del propio Andrés Manuel López Obrador. Sucedió que, en el ámbito de la secretaría de Economía se acordó el refrendo y la revisión vehicular, en la ciudad de México, de todos aquellos automóviles de modelo 2018 y hacia atrás, con la sana intención de contribuir a la calidad del medio ambiente y también, por supuesto, de que le entraran unos pesos adicionales a las arcas del gobierno de la República y también de la ciudad de México, por supuesto. Tal disposición se publicó, rápido, en el Diario Oficial de la Federación y esto dio lugar a una pregunta en la “Mañanera”, que sorprendió al presidente, quien adelantó, ahí mismo, que dejaría sin efecto tal medida, máxime que esto “se hizo sin mi consentimiento”. -No vamos a bolsear más a los mexicanos – dijo con el énfasis que le caracteriza. Evidentemente una clara “balconeada” a la sinaloense Tatiana Clouthier, quien al enfrentarse a los medios tuvo una reacción mesurada. -Pues sí. Me regañaron ¿Qué le voy a hacer? – se limitó a contestar. Y sí. ¿Qué hacer? Porque, imagínese usted, si renunciaran al cargo todos aquellos funcionarios que han sido objeto de comentarios de esta naturaleza pues sencillamente ¡ya no quedaría nadie en el gabinete presidencial! ¿O sí? -0- A propósito. Ya en su semanera del lunes próximo pasado, el gobernador Rocha Moya había mandado ciertos mensajes, que no pueden pasar inadvertidos para los agudos observadores y periodistas sinaloenses. Y queda claro, que Rocha Moya no omite a nadie, ni tan siquiera a sus más cercanos colaboradores como lo es la secretaria de Educación Pública y Cultura, Graciela Domínguez, quien contestó con imprecisiones – días atrás – a una pregunta de los reporteros sobre las deplorables condiciones en las que se encuentran una gran parte de las escuelas primarias del sistema educativo estatal: -La secretaria -dijo Rocha textualmente- debe informar lo que se hace y no lo que no se hace, para no caer en vaguedades. En la misma dirección,