El presidente municipal de Culiacán Jesús Estrada Ferreiro puso casi en estado de pánico a Rubén Rocha Moya con la acusación pública de que no ganó limpiamente la gubernatura.
La advertencia fue muy clara: si desde el Congreso de Sinaloa se le somete a juicio político, Estrada exhibirá que Rocha fue impuesto por el narcotráfico.
Cuestionado al respecto en la conferencia semanera de ayer, el gobernador se fingió despreocupado y hasta pidió que el alcalde diga lo que sabe.
Puro atole, porque hará todo lo posible para mantenerlo calladito al tratarse de un tema que le duele mucho al de Badiraguato, como estigma que inevitablemente cargará toda su vida.
Hay una diferencia enorme entre el que periodistas, analistas y políticos adversarios recordemos que Rocha fue apadrinado y apoyado en la elección por el narco, a que lo diga un alcalde de Morena.
Lo saben el gobernador y lo sabe también el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Hay que ser muy ingenuos o excesivamente optimistas para creer que lo del enjuiciamiento político contra Estrada Ferreiro es un asunto de legalidad, de derechos y de razones.
Será una decisión de conveniencias políticas, y punto.
EL PRI TRAIDOR
Se siguen haciendo bolas los priístas, y eluden que la única opción de supervivencia en Sinaloa y en el país es la de ponerse del lado del pueblo.
Deben entender primero que nadie se traga ya sus simulaciones, y que no solamente es absurdo sino además insultante pretender que en aras de la unidad deben perdonarse las traiciones y a los traidores.
Con una puntualización importante: traidor no es el que agarra chamba con la cuatroté, sino el que ha jugado y sigue jugando contra el PRI.
Lo peor que le puede pasar a este partido es dejarlo en manos de uno de esos que fingen ser priístas pero en realidad trabajan políticamente para Morena.
GRACIAS, LLORÓN
Pocas cosas le duelen tanto al mesías como la de la mansión del bienestar, y estuvo a punto ayer de tirarse otra vez al suelo ante el juego lego de la casa austera en la que vivió el junior José Ramón.
Carcajadas al por mayor provocó Lopitos con su supuesto de que este asunto quedó debidamente aclarado y que no hubo ni de cerca el tráfico de influencias que se acusó.
En realidad hay que darles las gracias porque todas las “aclaraciones” sirvieron para confirmar que la renta de 100 mil pesos mensuales de la casa gris confirmó ante millones de mexicanos que lo de la honestidad y la austeridad de AMLO son un engaño muy burdo, para puro retrasado mental.
GERARDO VARGAS LAMBISCÓN
Gerardo Vargas Landeros, alcalde morenista de Ahome, advierte que contra la constitución seguirá promoviendo la ratificación de mandato a favor del presidente asesino y corrupto.
Quiere ser gobernador y su “fórmula” es andar de lambiscón, sin importarle pisotear nuestras leyes.