La Real academia de la lengua define el término vergüenza como “Turbación del ánimo ocasionada por la conciencia de alguna falta cometida, o por alguna acción deshonrosa y humillante”. Está claro que los políticos de las islas no se sienten perturbados por las numerosas decisiones que caracterizan sus acciones de gobierno, porque no hay nada más deshonroso que anteponer los intereses de unos pocos a los de la mayoría. A ellos les viene mejor la definición de cinismo: “Desvergüenza en el mentir o en la defensa y práctica de acciones o doctrinas vituperables”. Ejemplos hay demasiados, pero en estos últimos tiempos hay algunos que destacan como auténticos campeones del cinismo político, y este es el caso del alcalde, perdón, ex alcalde de Mazatlán, Sinaloa, Luis Guillermo “el Químico” Benítez, donde pronto será convertido oficialmente en Secretario de Turismo en Sinaloa.
¿Le quedaba de otra al Químico? Creo que no, de lo contrario estaría firmando su sentencia política, y de paso, acelerar el proceso legal y muy posiblemente pisar la cárcel. De ser un huracán categoría 5, se convirtió en una pequeña cabañuela, pues el monstruo económico que es el puerto Mazatleco, ahora dirigirá una secretaría de nueva creación por el anterior gobierno, con limitados recursos, que desde la federación han debilitado programas para incentivar la pesca en el territorio mexicano, es más, contar con funcionarios “non gratos” de la propia secretaría.
También caer políticamente, así de drástico, estará sometido y alejado de una posible candidatura a futuro, ya que de forma inteligente lo mandan a una posición en donde estará alejado y sometido a las órdenes no solo del gobernador, sino también, será un subordinado del propio secretario general de gobierno.
Los enroques que se han venido dando en estos últimos días, obedecen únicamente al 2024, y con esto queda demostrado que, Luis Guillermo “el Químico” Benítez estará únicamente como subordinado, matando el gobernador dos pájaros de un solo tiro, quedar bien con el ejecutivo federal y sus criaturas a nivel nacional, y de paso, quitarse de encima al Químico Benítez, y de paso, consolidar su poder y mandar una señal muy clara a los demás alcaldes de nuestra entidad.
GOTITAS DE AGUA:
¿Quién podría seguir en la lista de alcaldes irreverentes? Tierra Santa, Salvador Alvarado, podría ser la siguiente víctima, pues nos comentan, que no están muy contentos con el desempeño del alcalde Guamuchilense, Armando “el iguano” Camacho, que, por cierto, el ejecutivo federal pisará la tierra de Pedro Infante este próximo fin de semana.
Por eso decimos, que la jugada del gobernador, por mucho que se comente que haya invitado a formar parte de su gabinete a un presunto corrupto, digo presunto, porque mientras no se tengan las pruebas oficiales no se puede afirmar dicha corrupción por parte del Químico Benítez. Y al aceptar dicha propuesta del gobernador, podría decirse, que saldría exonerado del proceso judicial que enfrenta.
Por otra parte, ya no existe fuero, y será el procedimiento legislativo y judicial que permita con toda libertad enjuiciar al Químico Benítez, todo por cuentas mochas al instalar las luminarias y lo que se le agregue. “Si cierran la puerta, apaguen la luz”. “Nos vemos Mañana”…
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