Superman, el hombre de acero, no podría funcionar en Culiacán por las intensas lluvias y en poco tiempo lo tendríamos embodegado y lleno de moho.
No es apto para que nos cuide a los culichis.
Otro personaje que tampoco daría resultados en nuestra ciudad es el famoso hombre araña.
Su accionar es lanzando sus hilos sobre los rascacielos y de esa manera avanza en las metrópolis que cuida de día y de noche.
En Culiacán hay muy pocas construcciones de más de dos pisos.
A pie no sirve el hombre araña.
Batman es el indicado, pero cobra muy caro por venir a Culiacán.
De seguro supo lo de los hijos del Chapo Guzmán frente a las tropas del gobierno de la cuarta transformación y le saca al bulto.
No podemos criticarlo.
Traer a la mujer maravilla, significa acercar alimento a los tiburones y en dos que tres se devuelve embarazada por los reyes de la noche.
Hay que borrarla de la lista.
Robin es el ayudante de Batman y de plano está muy tierno para que se aviente la chamba solo.
Capaz que la plebada buchona lo arrope y lo meta entre sus filas y todo por su inexperiencia y juventud.
Kalimán es cosa del pasado y Solín quedó huérfano y no alquila sus servicios para seguridad pública.
Hulk es el hombre verde y pudiera ser buena opción.
No sabemos cuanto cobraría por apaciguar a los malosos de nuestra ciudad capital y tampoco sabemos si está contratado en otra parte.
Tendríamos que tráele la novia y a lo mejor le pone los cuernos con esta raza de los grandes gastos y lujosos autos.
Culiacán es libre y soberano.
El presidente de México pide permiso para entrar a Sinaloa.
El Ejercito no puede protegerlo y es mejor tratar con los mandos facticos que le garantizan una estancia placentera en nuestras tierras.
Los ciudadanos culichis nos conformamos con volver sanos y salvos a casa y nos importa madre que se maten entre ellos.
¿Quiénes son ellos?
No lo sé y tampoco quiero saberlo.
El disimulo es una manera de funcionar sin que nos truenen las baterías.
Rezamos por los que aparecen muertos.
Sentimos lastima por sus familias.
No nos metemos a investigar quién y por qué lo hizo.
Así pasan los días, los meses y los años.
Preferible traer ojos con lagañas, que pelones y en cajón de muerto.
No somos totalmente felices y tampoco completamente desgraciados.
La vida es así y tenemos que comprenderla.
Hasta mañana.
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