Por andar de afrentoso y hocicón, el gobernador Rubén Rocha Moya recibe como respuesta un duro madrazo del líder moral del Partido Sinaloense, Héctor Melesio Cuén Ojeda.
Cansado de tantos madrazos, Melesio exhibió la doble moral de su “amigo” que entre muchas otras cosas criticó que en la UAS trabaje gente que labora también en el PAS.
Hay muchos morenistas y funcionarios del gobierno estatal que cobran sin trabajar en la universidad, le dijo Cuén al otro exrector.
Y aunque se refirió solamente a funcionarios y otras gentes del resto de los poderes del estado, para pocos es un secreto que dos hijos del gobernador ya fueron públicamente señalados por aparecer en la nómina de la Universidad Autónoma de Sinaloa, cobrando sin trabajar.
Esto lo conoce muy bien el jefe del ejecutivo estatal, y sabe también que es delito.
La afrenta parece llegar a niveles irreversibles, aunque ya hemos visto que muchos de nuestros políticos tragan mierda sin hacer gestos.
Suceda lo que suceda, es de película la zarandeada contra Rocha Moya.
Dice un proverbio popular que para tener la lengua larga hay que tener la cola corta, y en el caso de don Rubén lo primero sí aplica pero lo segundo nadita de nada.
Eso le pasa por asumir pleitos generados por sus rabias, más que por la razón.
Por lo visto Rocha nunca aprenderá, y estoy por convencerme de que de verdad ya chochea gravemente.
LA PRENSA ES LA “CULPABLE”
Es fácil entender cómo es posible que México esté tan atrasado luego de la infame ratificación de que vamos muy bien en seguridad pública.
Nada que nos extrañe la desvergüenza mostrada por el presidente López Obrador, por el Secretario de Gobernación Adán Augusto López y por el Secretario de la Defensa Luis Cresencio Sandoval.
Aunque parezca increíble, atoles en cantidades industriales y maromas olímpicas para acusar que los conservadores y los periodistas intentamos engañar al país exagerando los hechos de violencia que se registraron este pasado fin de semana.
Que nadie le exija al gobierno cambiar la estrategia de los abrazos no balazos, porque según ellos está funcionando de maravilla.
No hay quien les gane en lo malísimos que son para gobernar, y menos en lo cínicos.
Lo peor es que no se cansan de destruir al país y seguir matando inocentes.
Van por más, los rufianes.
CONTRA LA PARED, POR MENTIROSA Y RATERA
Yesenia Rojo Carrizoza pasó a una situación insoportable, ahogada por sus numerosos engaños y mentiras.
Está tan acostumbrada a defraudar y robar con impunidad absoluta, que no parece concebir lo grave de su situación.
La señora dice que a nadie ha robado, y que mucho le han afectado los señalamientos de que es una ladrona y una vividora.
Pero ante las denuncias públicas y formales y el escándalo que han generado, algunas de sus víctimas se atrevieron a dar la cara y a exigir que se les pague.
La cantidad es de aproximadamente 500 mil pesos adeudados a particulares, además de los 805 mil pesos prestados por el STASE.
Y creciendo día con día, conforme salen más denunciantes.
Más de un millón 300 mil pesos que muchos se preguntan en dónde están, y aquí se los vamos a decir: en un casino.
La dizque luchadora social que no tiene cédula profesional como abogada pero de repente se presenta como “maestra en derecho” es ludópata.
Sí, señores.
Mucho de ese dinero que pide prestado y no paga se va al caño, en apuestas obviamente perdidas.
Mientras le sigue subiendo el agua y la tiene hasta el cuello, ella continúa con sus falsedades.
Alega que el carro en el que se mueve es de su propiedad, pero que no tiene factura porque todavía debe algunas mensualidades.
Ya dijimos aquí que el dueño es un varón, y que tiene denuncia formal por ese delito.
Que nadie puede andar durante tres años en un carro que no es de su propiedad, dijo como si nadie supiéramos cómo masca la iguana.
Lo cierto es que ese vehículo no está registrado ni en Sinaloa ni en ninguna otra parte del país.
Vaya, Yesenia ni siquiera tiene licencia para conducir.
La razón de por qué anda como si no tuviera delito es porque tenemos autoridades omisas y cómplices.
Se seguirá tirando al suelo acusando que se le difama porque defiende a los necesitados y pisa callos de políticos poderosos, pero la verdad irrefutable es que ha despojado a muchas personas de su dinero.
Eso se llama robar, por más que llore.
Si no quiere que se le llame ladrona y vividora, que pague lo que debe y deje de quitarle dinero a los demás.
Todas mis columnas en: https://altoparlante.com.mx/altoparlante/.
La cizaña prende abonada con inconsecuencia