Altoparlante

El robo con venta de uniformes en la UAS

Vaya escándalo el que se está generando por la noticia del robo con venta de uniformes de la UAS.

Como ya habíamos advertido, el rector Jesús Madueña Molina no tiene llenadera.

Abuelita de batman, se venden camisetas en todas las prepas de la universidad.

Tan sólo en el nuevo ingreso son 22 mil alumnos, pero también compran los de segundo y tercer año.

El costo de las playeras es de 350 pesos, y no son pocos los que tienen que comprar dos porque es obligación llevar la prenda para ingresar.

Además de las camisetas, se venden faldas, pants, y uniformes completos.

Pants completos en 850 pesos y faltas en 280 pesos.

Estas ventas son no solamente en el bachillerato sino también en el jardín de niños, el programa de inglés y facultades del área de la salud y humanidades, entre otras.

Uniformes UAS

Además, camisas para los trabajadores, gorras, vasos, chalecos, tazas, maletines, plumas, agendas.

Y uniformes para equipos deportivos.

Estamos hablando de muchos millones de pesos.

Porque entran en esas cuentas fantasmas llamadas “ingresos propios”.

A nadie se le rinden cuentas de lo que entra y en dónde termina el dinero.

Hubo hace días un señalamiento muy duro de que el negocio del presente año lo está haciendo el rector Madueña con dinero que correspondía al pago de las primas vacacionales.

Volvamos a que no hay transparencia ni rendición de cuentas.

Ya hemos señalado varias raterías encabezadas por Jesús Madueña, impunes precisamente por la falta de transparencia.

Nadie sabe, nadie supo.

En Culiacán, Mazatlán y Los Mochis hay tiendas universitarias que venden los uniformes.

En el resto de los municipios, por lo menos en el caso de las preparatorias se obliga a los directores a vender.

Número de camisetas igual al número de alumnos de nuevo ingreso, por lo menos.

Me aseguran que no existe ningún control fiscal.

Que no hubo licitación, y que los contratos con el o los proveedores fueron en directo.

Al antojo y conveniencia del corrupto que dirige la universidad.

Desde la misma UAS nos dicen que no hay mucha novedad, pero que el descaro ahora es mayor.

Que hasta hace poco, todas esas ventas las controlaba directamente Héctor Melesio Cuén Díaz.

Hoy el cabeza es ni más ni menos que el propio rector, y opera con la directora de Promoción Financiera, Norma Aguilar, alguien que supuestamente se iba pero finalmente se quedó.

En este año lo de los uniformes y demás enseres de venta puede convertirse en un asunto de denuncia formal en contra de la universidad.

La resistencia que aquí anunciamos estaba despertando, se muestra más organizada y decidida.

Ya advertimos en Altoparlante que no puede seguir existiendo una UAS que no nos rinda cuentas sobre los manejos de sus dineros.

Miente Madueña al decirnos que existe transparencia.

Prácticamente nada se sabe sobre cientos de millones de pesos manejados como “recursos propios”.

Puntualicemos que no estamos en contra del uso de los uniformes, que por supuesto tiene ventajas.

Lo que de ninguna manera podemos permitir es que vivales universitarios sigan haciendo negocios a costa del pueblo.

Que se enriquezcan porque se sienten dueños de la UAS y terminan impunes en todas sus bribonadas.

Madueña debe rendir cuentas a los universitarios y a todos los sinaloenses.

Clarificar de dónde salen esos recursos y en dónde terminan las ganancias.

Todas mis columnas en: https://altoparlante.com.mx/Altoparlante/,

 

Partida
Juan Manuel Partida Valdez

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