La tolerancia llegará a tal nivel que las personas inteligentes tendrán prohibido pensar para no ofender a los imbéciles”. Frase de Fiódor Dostoyevski.
El dos de junio tuvo dos lecturas y desde luego en una de ellas tiene ya sus consecuencias. ¿Qué el lunes negro es un fenómeno mundial? Efectivamente, lo puede ser.
¿Que la paridad del peso dólar ya superó las 19 unidades? Bien puede ser una consecuencia de la turbulencia de los mercados. Pero como explicar el más reciente informe del INEGI que muestra una pérdida de empleos en el país de 863 mil 862 empleos tan solo duramente el mes de junio.
El gobierno ocupa dar facilidades a los generadores de empleos para crear un millón cada año y así poder atender tan solo la demanda de los jóvenes que se incorporan al mercado laboral. Ya para atender el rezago histórico es hablar de mucho más.
Insistimos. Cómo explicar que durante junio se perdieron todos los empleos que se deberían generar en todo el año completo, si durante ese mes debió ser de festejo por el triunfo arrollador de Morena en el país y de haber garantizado la continuidad. Ahí está el problema precisamente.
Los inversionistas y empresarios desde los pequeños hasta los grandes, interpretaron de diferente manera el triunfo de Morena. No lo vieron de la misma forma.
Para Morena, el resultado de la elección del pasado 2 de junio fue el día de la consolidación del nuevo régimen de gobierno.
Fue el día cuando el pueblo mayoritariamente le dio un triunfo arrollador a Morena, eligió a Claudia Shienbaum como su nueva presidenta, refrendó el proyecto político iniciado por Andrés Manuel López Obrador y de paso el pueblo les dio un cheque en blanco para hacer las reformas constitucionales que ellos quieran.
Ese si es motivo de festejo. ¿Y lo será para las familias de los trabajadores que apoyaron con su voto para que los Morenos que si están prendidos de la ubre presupuestal festejen?
Evidentemente, es la clase trabajadora quien ya está pagando las consecuencias.
1.-Durante el mes de mayo de acuerdo al IMSS se perdieron 25 mil 203 empleos formales en el país lo cual representó la mayor caída desde la crisis financiera de 2009, excluyendo el 2020, cuando ocurrió la pandemia.
Los analistas atribuyeron la pérdida de dinamismo en el empleo a la desaceleración económica, y a la cautela por el proceso electoral; además avizoran un menor crecimiento para el presente año.
2.-Ojo, desde Mayo el empresario e inversionista, ya estaba cauteloso y actuaba con recelo por el tema electoral y sus posibles resultados.
Carlos Ramírez, socio consultor de Integralia, resaltó que la caída del empleo de mayo “es una cifra horrible y preocupante, que quizás se explique por cierta cautela que tomaron las empresas para no contratar más gente a la espera del cambio político, previendo un segundo semestre complicado”.
3.-Pero si la pérdida de empleos en mayo fue catalogado como horrible y preocupante, entonces lo ocurrido en junio no tiene nombre.
En junio del 2024, de acuerdo al INEGI, el mercado laboral en México se deterioró, ya que la población ocupada tuvo una disminución de 863 mil 862 empleos respecto al mes previo, o sea el mes de mayo.
4.-¿Y a dónde se fue esa gente que se quedó sin empleo? Según el INEGI casi todos se fueron a la economía informal, es decir, a hacer lo que pueden por su cuenta para sobre vivir.
Las mujeres son las que más perdieron con 267 mil 715 puestos de trabajo perdido y la reducción de sus ingresos para aquellas que conservaron uno.
5.-En fin, son casi 900 mil empleos perdidos y casi 900 mil familias que ya sufren la consecuencia de la desconfianza que genera entre los inversionistas las políticas populistas del régimen que avanza y se consolida en México como un gobierno totalitario.
Lo dijo el propio presidente. A él no le importan las reacciones del mercado ni la de los inversionistas que ven con malos ojos la reforma al poder judicial por ejemplo. ¿Y les importará a las familias que se quedan sin empleo o las que pierden su pequeño negocio?
Se va a saber. Hasta ahorita no se han expresado.
Habrá que estar pendientes.
PASO A PASITO.-La próxima presidenta de México, Claudia Shienbaum reunió ayer a los gobernadores del Noroeste del país. Se habló de los proyectos de infraestructura que se ocupan en esta región del país y que los gobernadores traen sus portafolios como obras prioritarias.
Rubén Rocha, gober de Sinaloa planteó la culminación de la carretera Topolobampo-Chihuahua a la cual le hace falta un puente sobre el vaso de la presa Luis Donaldo Colosio en Sinaloa y varios kilómetros del lado de Chihuahua.
A la reunión asistieron la gobernadora de Chihuahua, Maru Campos; el gobernador de Baja California Sur, Víctor Manuel Castro; el mandatario de Nayarit, Miguel Ángel Navarro Quintero; de Sinaloa Rubén Rocha, así como representantes de los gobiernos de Sonora y Baja California.
PASITO CHÉVERE.-
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