México encarna ya a la “sociedad del miedo” que definió tan plásticamente Heinz Bude, en su espléndido trabajo sobre este mismo concepto, publicado en 2014.
El miedo marca una época en la que están avanzando los populismos de derecha y de izquierda. Aumentan los casos de depresión y se experimenta el capitalismo como una coyuntura crítica. El miedo es síntoma de una situación social de incertidumbre. La clase mayoritaria ve peligrar su futuro y el individuo se siente arrojado a un mundo en el que ya no se siente resguardado ni representado.
Hoy los gobiernos, particularmente los de corte populista no garantizan esa “estabilidad” añorada; sólo turbulencias y períodos de venganza o revancha política.
En 1994, producto del miedo provocado por la turbulencia política catalizada por sucesos tristemente célebres que ya se han comentado hasta el cansancio, como el artero homicidio del candidato priísta a la Presidencia de la República, Luis Donaldo Colosio y el pseudolevantamiento armado en Chiapas en enero de ese mismo año, la población mexicana inscrita en el padrón salió en masa a votar imponiendo un nuevo récord: 77.4% del padrón se manifestó en las urnas.
El resultado fue francamente abrumador: Ernesto Zedillo, candidato sustituto del PRI ganó con el 48.69% contra el 25.92% del panista Diego Fernández de Cevallos y el 16.59% del perredista Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano.
Como una tendencia atípica y –se reitera- producto del miedo de una sociedad mexicana a la incertidumbre perturbadora generada entonces… y también como resultado de aquella rabia contenida por los sucesos ya narrados, que repercutieron sin duda en el mundo laboral de las familias mexicanas, en sus economías y hasta en su relación con la esfera política y los servicios financieros.
Después, seis años más tarde, en aquel histórico triunfo de la oposición encabezada por el panista Vicente Fox Quesada, el PAN arribó a la Presidencia de la República derrotando por primera vez en la historia al legendario PRI, abanderado por Francisco Labastida Ochoa.
Votó el 66% del padrón y el resultado fue como sigue:
Vicente Fox Quesada ganó con el 42% aproximado del total de votos, contra el 36% aproximado de Francisco Labastida Ochoa; la diferencia entre estos dos candidatos fue de 2 millones 409 mil 918 votos; por su parte, el partido del sol azteca y su representante obtuvieron alrededor del 15% de la votación esta vez.
Como se advierte, no obstante que disminuyó la votación en 13 puntos en 2000, en comparación a la obtenida en 1994 –repito por causas atípicas, extraordinarias- la votación de este año –trascendental- que implicó un cambio de signo electoral en el Gobierno, por primera vez en 80 años, no significa que el 66% del padrón emitiendo su sufragio haya sido una votación pobre… es decir, un gran porcentaje de estos votos extraordinarios, en el pasado quizá (de 1988 hacia atrás) hayan sido parte del abstencionismo.
Para sacar al PRI de entonces y sacudir al sistema, fue necesaria la participación copiosa en las urnas… como lo fue en ese año 2000.
Este año no podría ser distinto; se confirma la tesis de que a mayor votación, más probabilidades de un “sacudimiento electoral” por resultado… de un cambio de “signo partidista”.
Y… ¿Cómo podemos afrontar el miedo y con qué ritos y discursos podemos entendernos y ponernos de acuerdo con los demás acerca de los miedos comunes?…
Con el único discurso que mueve a la gente en una campaña (militar, civil o en toda justa electoral)… el discurso de la probidad, de la congruencia y de la colaboración mutua entre correligionarios.
A la gente hay que hablarle con realidades… y con acciones; hablarle claro sobre su futuro inmediato, sobre la realidad del país…. y sobre todo, desde los liderazgos, poner el ejemplo, con probidad y humildad.
Los partidos de oposición están conscientes, comparten esta idea y sus dirigentes han puesto ya en marcha la nueva etapa de su estrategia, marcada a partir del desahogo del tercer debate, compromiso ineludible que, definitivamente marca tiempos y metas.
En el caso de la Ciudad de México en que ya anoche se cumplió con dicho compromiso, hoy ya despliegan esfuerzos para la promoción del voto el 2 de junio… para que la gente salga a votar en pocas palabras.
El PRI, no obstante que en las campañas presidenciales aún no se verifica el tercer debate presidencial, pues será hasta el próximo domingo 19 de mayo, su dirigente ya se encuentra en las diferentes entidades y regiones a donde acude a acuerpar a los candidatos de su partido y al Frente Opositor “Fuerza y Corazón Por México”, consecuentemente, haciendo una puntual convocatoria a la población a que acuda esta 2 de junio a votar; a que rompa la apatía y la flojera y salga decidida con su acto de sufragar, a romper paradigmas… a irrumpir con firmeza en el plano de las grandes decisiones que atañen a nuestro país y a nuestra sociedad.
Alejandro ‘Alito’ Moreno ha sido una auténtica revelación también como promotor del voto en tierra…
Circula profusamente un vídeo donde se le ve en varias capitales del país, encabezando brigadas juveniles en cruceros y puntos neurálgicos del tráfico vial y peatonal de esas ciudades, poniendo calcas a vehículos (con el respectivo permiso de los automovilistas propietarios) y saludando de mano –con empatía y humildad- a los potenciales votantes, así como entregando volantes de mano o “flyers” a peatones o transeúntes. Esto lo identifica aún más con su “tropa” de cada Estado; le da la probidad necesaria para encabezar o requerir cualquier tarea desde la Ciudad de México.
De igual forma, otro personaje y que también –junto a Alejandro Moreno del PRI- está llamado a ser un genuino protagonista de la próxima Legislatura en el Senado de la República, Luis Donaldo Colosio Riojas, en una valiente declaración captada en un vídeo que desde ayer por la tarde le dio la vuelta en redes sociales al país, hace un atento llamado a la sociedad a salir a votar este 2 de junio para provocar ese cambio tan necesario, dado que “el país está sumido en una crisis de violencia como no sucedía desde la Revolución Mexicana….definitivamente el país no anda bien –dijo-
…. La gente debe decidir este 2 de junio entre ciudadanos que los van a representar de manera libre, de manera profesional, de manera entregada o bien si qieren escoger a candidatos que no tienen voluntad propia… que son ‘agachones’ de un poder presidencial… y hay que estar bien preparados (ante la intentona del crimen organizado de incidir en el resultado electoral) con nuestras Policías.”
De igual forma, el candidato Santiago Taboada del Frente Opositor “Fuerza y Corazón Por la Ciudad de México”, ayer durante el último debate por la Jefatura de Gobierno de la Ciudad, fue enfático al final de su emotivo mensaje de cierre, en el sentido de que solo saliendo a votar en masa, abrumadoramente, podremos romper con la jetatura de estos 27 años de malos gobiernos en la capital de la República.
Santiago Taboada, en honor a la objetividad fue el ganador del encuentro cívico verificado la noche de ayer en las instalaciones de Multivisión, en la colonia Moctezuma Segunda, por los rumbos del Circuito Interior y frente al vetusto inmueble aeroportuario de la Ciudad de México.
En honor a la verdad y por las evidencias, las cosas para Morena en la CDMX no pintan nada bien para el próximo 2 de junio.
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A propósito:
Circula profusamente en redes sociales y en chats de ciudadanos de algunos estados del norte del país, un mensaje en donde claramente se empieza a dudar de la postura que habrá de asumir Manuel Bartlett Díaz, en el sentido de respetar el armónico desarrollo de la jornada electoral del próximo domingo 2 de junio, dada su pésima reputación como un individuo que no respeta la legalidad de los actos públicos del Gobierno en el que trabaja, tal y como sucedió en aquella caída de sistema de 1988, donde misteriosa y súbitamente tras ese “incidente técnico cibernético”, cambió la tendencia y el total de la votación emitida a favor del candidato Cuauhtémoc Cárdenas y a partir de entonces –en lo sucesivo- se tornó a favor de Carlos Salinas de Gortari.
El mensaje que circula señala que un alto funcionario de la CFE, se pronunciará públicamente denunciando que Manuel Bartlett Díaz, director General de CFE, dio la instrucción tajante de aplicar estrategia de “apagones” ese 2 de junio día de la jornada electoral…. Seguramente con el fin de que se “caiga o se calle el sistema” de nuevo…. Habrá que estar pendientes de la denuncia pública del alto funcionario, que seguramente renunciará a su cargo en el acto…. Y hay que “cuidarle las manitas” al poblano-tabasqueño.
A propósito de la “sociedad del miedo” en que nos hemos convertido en México.
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