Como esperábamos, el hipócrita Lopitos confirmó que es un trasero grande.
El miserable presidente no le dio derecho de réplica a la senadora Xóchitl Gálvez, quien se quedó esperando un rato en la puerta de palacio nacional.
Cuántas veces lo hemos visto insultar y denostar desde sus mañaneras, sin misericordia y sin vergüenza.
Muchos de sus ataques están llenos de infundios, a sabiendas de que nadie podrá recriminarle de manera directa.
No los deja entrar a las conferencias, y listo.
Le falta valor, y por eso el mote de trasero grande.
Sinónimo de esa palabra de cinco letras de comienza con CU y termina con LÓN.
Realmente sin novedad, porque bien sabemos que es una mierda.
AGRICULTORES, A LUCHAR CON FIRMEZA
Regresan hoy a las manifestaciones los productores agrícolas de Sinaloa y de otras entidades del país.
En Culiacán sitiarán el palacio de gobierno estatal, y decidirán qué otras instalaciones tomar.
Están cansados de que les sigan jugando el dedo en la boca.
Así parecían estar antes, pero cedieron ante los atoles.
Necesitan entender que solamente luchando con fuerza tienen posibilidades de ser escuchados por los desgobiernos morenistas.
Se tiene que estar muy tarado para no ver que el problema sigue prácticamente igual que desde el comienzo.
López Obrador se ha negado a cumplir su promesa de precios justos para las cosechas.
Maromas interminables en las que se lavan siempre las manos.
Ninguna voluntad real hay de apoyar a los agricultores, y la obligación que éstos tienen es más que evidente.
Manifestarse con energía y no ceder hasta que se les resuelvan los problemas.
No abandonar otra vez la lucha con más falsas promesas y mejoralitos.
Ser inteligentes o tontejos.
Ojalá que se animen a una lucha verdaderamente digna, sin ingenuidades ni cobardías.
EN EL PRI, LOS TRAIDORES ESTÁN AL MANDO
No sabe uno bien si ponerse a reír o a llorar ante los dizque muy dignos que reprochan las renuncias de “traidores” al PRI.
Sin que descartemos que algunos de ellos lo hacen por orden del patrón, más que por convicción personal, razones de sobras hay para darle la espalda a este partido empecinado en burlarse de los sinaloenses y los mexicanos.
Verdad irrefutable es que dirigentes priístas han incurrido en traiciones repetidas.
La pasada elección de gobernador en Sinaloa es un ejemplo muy claro.
Acabamos de ver la imposición de dirigentes estatales, con una convocatoria mañosa y perversa.
Está claro que a quienes mandan en el PRI no les importa su militancia.
La desbandada es mayor de lo que se observa, y deben corregir en lugar de ponerse a llorar.
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