Se confirma cada día con mayor contundencia que Enrique Inzunza Cázarez, Secretario General de Gobierno de Sinaloa, es un súper ratero sin llenadera.
Sus corrupciones cobran cada vez mayor notoriedad, y en la nueva edición impresa y digital de Proceso aparece un artículo que lo involucra.
Con el título de “Despojo con compraventas simuladas en Mazatlán”, la nota informa el robo de terrenos a particulares.
Con la cómplice corrupción de funcionarios de gobierno, jueces, notarios públicos y abogados.
Puntualicemos que el caso que señala la revista Proceso, de Mazatlán, es sólo uno de muchos.
Lo mismo sucede por ejemplo en Culiacán, en terrenos cercanos a los ríos, y en Topolobampo.
Gente que tenía mucho tiempo en sus propiedades, hasta más de cuarenta años viviendo ahí incluso con escrituras, encontraron la aparición de otros “dueños”.
Aunque parezca increíble, los notarios y los registros públicos de la propiedad desaparecen a los propietarios reales.
“Juicios” con testigos que salen de sus tumbas para declarar ante el juez.
El uso de falsos abogados de los dueños, para favorecer a los ladrones.
Las dependencias de gobierno involucradas son de la Secretaría General de Gobierno.
Desde ahí mismo se controla a los jueces y a los notarios públicos cómplices.
Enrique Inzunza Cázarez es el titiritero corrupto, que opera con impunidad y descaro.
Negocios por miles de millones de pesos, a lo largo y ancho de Sinaloa.
En asociación de políticos y miembros del crimen organizado.
¿Y Rubén Rocha Moya?
Como el chinito.
Según don Rubén, el camisa rosa es un hombre bien honesto.
Y no es ni lo primero ni lo segundo.
Tiene derecho a seguir haciendo de su ése un papalote, pero no a ser deshonesto.
El gobernador debe proceder con energía contra su secretario ratero.
Hacer valer sus tan reiterados atoles de que no permite corrupciones.
Si no lo hace, la conclusión será tremendamente obvia, por más que intenten fingir: hay un acuerdo para robar juntos y/o para solapar.
EN EL EDOMEX, LAS MISMAS TRAICIONES
Morena ganó el Estado de México y perdió en Coahuila.
Imposible no decepcionarnos ante la victoria de una candidata morenista que se demostró es una ratera del más alto nivel.
Como hace dos años en Sinaloa, priístas traicionaron a sus candidatos en el EDOMEX.
Y a pesar de las muchas mapachadas, Alejandra del Moral felicitó a Delfina por su victoria, y reconoció a las autoridades electorales por su trabajo.
Así de jodidos estamos, con partidos y candidatos que simulan competir y terminan felices con las derrotas.
PAOLA GÁRATE, ESPURIA DE DOBLE MORAL
En Sinaloa, la imposición de Paola Gárate confirma un PRI que no quiere derrotar a Morena.
Alito Moreno, el dirigente nacional, actuó de nuevo como infiltrado de la cuarta transformación.
La consulta a las bases mediante convocatoria fue otra pésima burla del mandatario tricolor.
Ahí queda el twitt en video con el que doña Paola lamentó hace algún tiempo que en su partido no se tome en cuenta a las bases.
Se puso muy digna ella, para terminar demostrando que es una mujer sin moral.
Es intolerante, y tras usar a sus marionetas se lava las manos diciendo que nada tiene que ver.
Los hechos están ahí, a la vista de todos, por encima de los atoles de la espuria.
Todas mis columnas en: https://altoparlante.com.mx/altoparlante/.